Con quemaduras de grado A y B en la cara, cuello y tórax llegó Débora Mansilla, en un auto particular al hospital la tarde del 25 de diciembre. Tenía el 50 por ciento del cuerpo quemado. El episodio ocurrió en el interior de su vivienda en Villa Gobernador Gálvez. Los vecinos vieron correr a la mujer prendida fuego y su pareja por detrás con la hija de ambos en brazos. Al concubino lo imputaron por lesiones graves calificada por producirse en un contexto de violencia de género y por acuerdo de partes se fue en libertad. El miércoles Débora falleció por una falla multiorgánica como consecuencia de las quemaduras y la Fiscalía fue tras su concubino, que se presentó espontáneamente este jueves en Tribunales. Fue imputado de homicidio doblemente calificado: por la convivencia y por tratarse de una mujer víctima de violencia de género. El sospechoso, de 21 años, hizo su descargo. Para la jueza hubo un cambio en el panorama legal del caso, no vio un intento de suicidio por parte de la víctima de 18 años y dictó la prisión preventiva contra el sospecho.
Brian Fabián O. llegó caminado a los Tribunales. Se sentó en el pasillo del primer piso esperando el inicio de la audiencia. Su familia esperaba detrás de la puerta vidriada el permiso para ingresar. Finalmente, la sala 4 fue habilitada. De bermudas de jeans, zapatillas y remera bordo entró y se sentó junto a su defensor oficial Daniel Kantor. Dijo ser repositor de un supermercado y atender un quiosco a metros de su casa de Villa Gobernador Gálvez.
El 25 fueron a la casa de su abuelo y luego a lo de la abuela de Débora con la hijita de ambos de un año, refirió. Regresaron a su casa y media hora después Débora salió prendida fuego, según el relato de vecinos. Un hombre la empujó a la zanja y cuando la sacaron una vecina la manguereo. La subieron a un auto, donde su concubino con la niña en brazos, el conductor y una tía de la víctima marcharon al hospital.
Débora quedó internada y Brian O. marchó preso, aunque después de la imputación de lesiones graves calificadas le dieron la libertad por acuerdo de partes. El miércoles Débora murió como consecuencia de las lesiones que sufrió. El fiscal Florentino Malaponte dijo que en la casa la policía encontró una botella vacía de alcohol, 4 encendedores y una cuchilla sobre la mesa. Para el funcionario Brian O. la roció y la prendió fuego. En la casa estaba la pareja, su hijita y un niño de 6 años hermano de la víctima. Único testigo ocular. El fiscal agregó que el acta de procedimiento que hizo el Comando Radioeléctrico dice que el imputado tiene un rasguño en el pectoral izquierdo y en el brazo, aunque el informe médico no indica lesiones. Malaponte no descartó que haya un error en la revisión médica.
Brian O. declaró en forma extensa y contestó preguntas. Ese día nos levantamos tarde y fuimos a la casa de mi abuelo, después a lo de su abuela y volvimos, relató. Estaba por ir a abrir el negocio, pero estaba cansado porque lo había atendido hasta las cinco de la mañana, relató y decidió quedarse. Dijo que Débora tenía muchos problemas familiares, que estaban criando a su cuñadito de 6 años. También que a su mujer le salió soriasis nerviosa tras la muerte de su padre en la Unidad Penitenciaria de Coronda. Tenía la costumbre de amenazar con matarse. Hacía tiempo que no agarraba la cuchilla, unos 6 o 7 meses aseguró.
Dijo que tuvieron un entredicho porque Débora quería pasar el 31 en la casa de su hermana y él de su abuelo. Se fue a acostar con la nena y ella tomó un cuchillo, se lo sacó y lo dejó sobre la mesa. Contó que en la cocina tenían una botella con alcohol con la que se lavaban las manos luego de preparar pollo para el negocio y Débora la tomó.
Se tiró alcohol encima, decía que se quería matar, tomó el encendedor y se acercaba y alejaba la llama del cuerpo hasta que en un momento se prendió. Dijo que no lo quiso hacer, lo quería asustar, pero no se quiso matar y le decía “llevá a la Sofi (la pequeña hija de la pareja) que no me vea así” aseguró.
Luego agregó que la llevó al baño y puso a cargar el calefón eléctrico, pero como tardaba corrieron afuera, intentó echarle agua con un bidón de un dispenser pero salía poca. En cuanto al nene dijo que Débora lo mandó afuera cuando se tiró alcohol y no la vio prenderse fuego, aseguró. De ahí en más fue lo que vieron los vecinos.
El fiscal pidió la prisión preventiva, el defensor cuestionó cada punto del planteo fiscal asegurando que se trató un accidente. Finalmente, la jueza Hebe Marcogliese hizo un análisis de la evidencia y aseguró que el panorama jurídico en el caso cambió tras la muerte de Débora y hay elementos para probabilizar el hecho y la autoría en cabeza de Brian O. No compatibilizó los elementos de prueba con la intención de suicidarse por parte de Débora y dispuso la prisión preventiva sin plazo. Además, ordenó la urgente realización de una cámara Gesell con el niño de 6 años y la pericia al celular del padre del imputado, secuestrado en el allanamiento a su casa. También se ordenó la realización de un oficio para solicitar la colaboración de la familia de Débora para realizar la medida con el niño.
