El análisis puede variar; los números son indiscutibles. En la última semana hubo un alarmante incremento de femicidios que volvió a desnudar el grado de vulnerabilidad que sufren las mujeres y la falta de políticas públicas para prevenirlos. El año terminó con un informe de la edila Norma López indicó que Santa Fe tuvo la tasa de crímenes de género más alta de la última década. Mientras se publicaban esas cifras, la lista seguía sumando nombres propios. El 29 de diciembre, un penitenciario de la capital provincial masacró a la ex y a cuatro miembros de su familia. La madrugada del 31, un hombre de 41 años mató a la madre de sus tres hijos y luego se suicidó, en Máximo Paz. Anteayer, una joven de 20 años de Villa Gobernador Gálvez murió en un hospital al que había llegado en Navidad con la mitad del cuerpo quemado. Y ayer, una adolescente que aún no fue identificada apareció calcinada dentro de un container de basura de zona oeste. Viviana Della Siega, directiva del Instituto de Género, Derecho y Desarrollo (Insgenar), reflexionó sobre el incremento en los casos de femicidio y detalló varios factores.
“Creo que el ataque contra las mujeres se da en gran parte porque están más empoderadas y suelen enfrentarse a los hombres. Hoy, el «sos mía o de nadie» corre más que nunca”, dijo la vicepresidenta de la ONG que posee Status consultivo ante la Organización de Estados Americanos (OEA).
“Realmente, la violencia que existe hacia las mujeres se ha incrementado, y en parte tiene que ver con la época, además que para las fiestas todo se incrementa”, continuó la referente feminista.
Entre los factores que analizó Della Siega, dijo que “la situación de impunidad y el clima de violencia que se vive en toda la sociedad en este momento” no son ajenos. Y mencionó “la represión de distintos sectores sociales por parte de las fuerzas de seguridad de la Nación que trasciende, se instala en la sociedad” e incrementa esta otra violencia contra las mujeres. También hizo referencia a un retroceso en las políticas de género del gobierno nacional y a la impunidad que muchas veces corre por cuenta de la Justicia. “¿Cuántas veces se decidió que una chica que murió calcinada se suicidó?”, se preguntó la referente, tras reiterar que la “impunidad influye en que los tipos se crean que pueden hacer cualquier cosa”.
Para Della Siega, “la lucha por la igualdad de género es una lucha por la liberación de las mujeres, y todas las luchas por la liberación generan una reacción violenta, en este caso traducida en femicidio”.