El ex presidente cubano Fidel Castro consideró ayer que el candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, quedó “descalificado” durante el primer debate con su rival demócrata Hillary Clinton hace dos semanas. Además, señaló que tanto el magnate como el actual presidente norteamericano, Barack Obama, merecen “una medalla de barro”
“No olvidemos que habrá debate de candidatos en Estados Unidos”, expresó Fidel Castro, el padre de la revolución cubana, en un artículo publicado en los medios oficiales de la isla.
“En la primera ocasión, hace dos semanas, se produjo uno que causó conmoción. El señor Trump, que se suponía un capacitado experto, quedó descalificado tanto él como Barack en su política”, señaló Fidel, que hace una década dejó el poder en manos de su hermano Raúl. En tono jocoso, agregó que a ambos “habría que darles una medalla de barro”
En el primer debate entre Clinton y Trump, el 26 de septiembre, los medios y las encuestas dieron a la aspirante demócrata como ganadora.
Para el segundo debate, que se realizaba anoche en la Universidad Washington de la ciudad de Saint Louis, Missouri, Trump arrancó en una pésima posición tras la catástrofe causada por la divulgación de un video de 2005 en el que menosprecia con lenguaje vulgar a las mujeres (ver recuadro).
Las autoridades cubanas, que en 2014 iniciaron una aproximación histórica con Estados Unidos, no habían expresado hasta el momento preferencia entre los candidatos en competencia para suceder a Obama.
Sin embargo, la postura de Fidel Castro constituye una señal de las inclinaciones de La Habana.
Hillary Clinton es abiertamente partidaria de continuar con la política de acercamiento a Cuba, mientras que Trump parece optar por una política más cerrada hacia el gobierno de los Castro.
Siempre escuchado en la isla, Fidel Castro, de 90 años, nunca ha cuestionado el giro de la diplomacia de su hermano, aunque recuerda constantemente su desconfianza hacia Washington y el presidente Obama, quien no obstante ha sido el artífice del deshielo entre ambos países. Por eso, en su publicación agregó: “Estados Unidos, el país imperialista más poderoso que ha existido, se autoengaña al asumir como doctrina un párrafo de la Declaración Universal de Derechos Humanos”.
Suma enemigos
Antes del debate de anoche, numerosos legisladores del Partido Republicano condenaron las palabras lascivas y con lenguaje machista sobre las mujeres de Donald Trump en un video filtrado el viernes pasado y le pidieron la renuncia, aunque el millonario, que pidió perdón ayer, siguió en campaña y agradeció el apoyo de sus votantes vía Twitter.
La ola de repudios y rechazos por parte de la dirigencia republicana fue tan contundente en las últimas horas, especialmente al acercarse la cita de anoche frente a las cámaras, que el propio Trump salió a cruzar a sus aliados en su arena preferida, las redes sociales.
“Tremendo apoyo (excepto de los dirigentes republicanos). Gracias”, escribió el multimillonario en Twitter y agregó: “Tantos hipócritas santurrones. Miren cómo caen en las encuestas…y en las elecciones”.
Cara a cara, segunda parte
Trump y Clinton protagonizaban anoche en Saint Louis, Missouri, el segundo debate presidencial. Al cierre de esta edición, Clinton trataba de reforzar su imagen, mientras Trump aplicaba una estrategia de reducción de daños por el video en el que discrimina a las mujeres.