El Festival de las Quebradas del Saladillo volvió a decir presente en la ciudad tras casi 37 años sin realizarse luego que la dictadura militar decidiera un prolongado “impasse” desde 1976. Según estimaron desde el Centro Municipal Distrito Sur –encargado de la organización– unas 1.300 personas se acercaron al Parque Regional Sur Sylvestre Begnis para ver el trabajo de distintas organizaciones sociales, culturales y comerciantes de la zona. “Por ser la primera realización después de tantos años podemos decir que hubo aciertos y algunos imponderables que seguramente se irán trabajando para las próximas ediciones. Realmente acudió mucha gente, hasta se hizo un city tour que trajo a personas que no conocían la cascada ni la historia del barrio”, contó a este diario Nora Laborde, historiadora y vecina de las tradicionales cascadas.
Entre los distintos artistas que pasaron por el festival, estuvieron Epuyén folcrock,La Ferroviaria, el hip-hop a cargo de Lima Sur,La Biabay el cierre con el reconocido bandoneonísta Cholo Montironi.
Haciendo algo de historia, Laborde comentó que “el festival nace acá en el barrio, por el impulso de los vecinos, gente que amaba y ama mucho esta zona”. “En sus comienzos se hacía en un lugar que era como una especie de anfiteatro natural que desembocaba por la que hoy es calle Lituania y antes se llamaba Diana. Los artistas eran folcklóricos y se hizo unos tres o cuatro años hasta la llegada de la dictadura que lo terminó prohibiendo”, añadió.
Con el objetivo de dar a conocer más información sobre las quebradas de El Saladillo, se proyectó un video donde se mostró cómo era en el pasado ese lugar que era frecuentado masivamente por la calidad de sus balnearios, con vecinos bañándose en sus aguas durante las décadas de los 70 y los 80. En su recorrido, el documental llega hasta la actualidad con el reciente descubrimiento del Gliptodonte.
“Esta reedición del festival nació en el Distrito Sur y se ampliaron los géneros artísticos al rock y el tango. Además, se contó con la presencia de emprendedores que participaron con distintas exposiciones en stands. También algunas ONG’s se dieron a conocer. De eso se trata, de mostrar las actividades del barrio y sus distintas expresiones tanto artísticas como sociales”, subrayó la historiadora.
La historia cuenta que en los años 70 –con la participación de la vecinal Saladillo Sudeste– comenzaron estos festivales. Para tal fin se eligió una formación natural dentro de los terrenos que a partir de 1972 serían el Parque Regional Sur. Se contaba con el apoyo de la provincia que cedía el uso del espacio y la municipalidad ponía la iluminación, el escenario y el sonido.
Pasado que vuelve
Todos los años para el mes de febrero comenzaba el festival, que duraba tres días, viernes, sábado y domingo. La apertura se anunciaba con fuegos artificiales ya que el espectáculo era nocturno y el cierre también era coronado con un espectáculo de fuegos artificiales. Este festival se llevó a cabo durante los año; 1973, 1974 y 1975. En 1976 el golpe de estado postergó tales iniciativas y desde hace unos años vecinos e instituciones intentan instalar este festival con la intención de que vuelvan a ganar esa magnitud de convocatoria y organización que tuvo en los 70.
