El fiscal del distrito de Saavedra, José María Campagnoli, pidió la detención de dirigentes y barras bravas del Club River Plate en la causa sobre supuestas amenazas al árbitro Sergio Pezzotta, durante el partido del último domingo cuando los “millonarios” descendieron a la Primera B Nacional.
Campagnoli solicitó a la juez de instrucción Wilma López ocho detenciones. Entre ellas la del directivo riverplatense Daniel Bravo y la de los sindicados barras bravas, Martín Araujo, Gustavo Larrain y Héctor Godoy.
La lista se completa con el responsable de seguridad de la entidad de Núñez, Gabriel Riccio, el vocal suplente Néstor Morelli, el directivo Francisco Biernakowicz (a quien se sindica como vinculado a barras) y al agente policial Matías Ponce.
Otro fiscal, Marcelo Retes, pidió a la Policía Federal que produzca un informe sobre las imágenes de video con las amenazas que habría recibido Pezzotta en el estadio Monumental durante el entretiempo del partido entre River y Belgrano de Córdoba (1-1), disputado el pasado domingo.
Retes requirió, también, se reúnan más elementos de prueba sobre las intimidaciones que ese día habrían sufrido los jugadores del equipo visitante.