Un piloto de una avioneta Cessna se estrelló este viernes cerca del mediodía contra un galpón de la empresa Air Liquide y generó conmoción en los vecinos de avenida Presidente Perón al 7600, de barrio Godoy. Como consecuencia del impacto murió el piloto, identificado esta tarde como Juan Manuel Medina, de 46 años, quien trabajaba en la firma y había sido despedido hace poco. Una de las hipótesis que circuló desde un principio fue que la colisión había sido de forma deliberada, aunque voceros de Fiscalía no confirmaron dicha hipótesis.
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Eran pasadas las 11 cuando los habitantes de zona oeste empezaron a escuchar el ruido de una aeronave que volaba bajo por las inmediaciones de Presidente Perón entre Juan XXIII y la colectora de avenida Circunvalación. Vieron la avioneta dar una vueltas y a los minutos escucharon un estruendo.
Con el correr de los minutos, se enteraron que el lugar donde la aeronave, un Cessna 152 que había despegado un rato antes desde el Aeroclub Alvear, se había estrellado era en la fábrica de gases Air Liquide.
Al asomarse vieron el amplio operativo que demandó la participación de cinco dotaciones de Bomberos Voluntarios y Zapadores, médicos del Sies y agentes de Defensa Civil, además de personal de Explosivos debido a que el siniestro se produjo en un galpón con envases de material combustible.
Voceros del Ministerio Público de la Acusación (MPA), informaron que la víctima fue identificada como Juan Manuel Medina, de 46 años, sin aportar detalles sobre lo que pasó como tampoco de las hipótesis del caso. Sólo se limitaron a agregar que “se dispuso la comisión del gabinete criminalístico para preservar y realizar relevamiento de la escena y tareas investigativas en relación a la mecánica del hecho”.
Además, se conoció que el cuerpo del piloto fue enviado al Instituto Médico Legal (IML) para los peritajes de rigor.
La planta de Air Liquide, firma dedicada a la distribución de gases envasados como oxígeno, nitrógeno e hidrógeno junto a servicios para la industria y la salud, fue evacuada ante el riesgo de explosiones o incendios. El tránsito por Presidente Perón a esa altura fue cortado por al menos dos horas y media por precaución.
Fuentes del Sies dijeron a El Ciudadano que además del piloto fallecido no hubo que lamentar heridos. En el galpón donde se estrelló el Cessna no había personal de la firma. Luego se conoció que los trabajadores no estaban en ese lugar debido a que estaban en el horario del almuerzo.
El director de Protección Civil, Gonzalo Ratner no brindó detalles sobre las versiones que surgieron del motivo de la colisión pero sí especificó que la aeronave había salido del aeroclub de Alvear y que las pericias a los restos iban a tardar horas debido a lo complejo de la escena.
«Lo que evitó una tragedia fue el lugar que impactó la aeronave y los protocolos de seguridad que adoptó la empresa, que fueron rápidos, y de los bomberos que como siempre tuvieron una rápida llegada tomando todas las medidas de precaución», describió.
Respecto del riesgo de explosión, Ratner indicó que en el momento del siniestro en sí hubo riesgo que «se pudo reducir gracias al accionar tanto de la empresa como de los profesionales de emergencias: bomberos, protección civil todas las áreas que vinieron rapido. El riesgo no está sólo en el accidente sino en el después y la verdad que esos protocolos funcionaron bien».
El director de Protección Civil volvió a destacar la labor de bomberos y de la empresa mientras resaltó que esas acciones permitieron que los peritajes pudieran ser seguros.
En tanto, el director provincial de Bomberos Zapadores, Andrés Lastortas, aportó que la primera dotación fue la que trabajó con la empresa para evacuar a los empleados. «Gracias a Dios había poca gente en ese galpón», dijo para señalar que la situación podría haber sido una tragedia muy grande.
Hasta este momento, desde la empresa no emitieron ningún comunicado mientras que en el lugar los empleados tenían la orden de no hablar con los medios de comunicación.
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¿Una venganza suicida?
Fuentes ligadas a la investigación deslizaron que el piloto fallecido, que había renovado su carnet en abril pasado y tenía habilitación hasta 2025, fue empleado de Air Liquide y había sido despedido poco tiempo antes del siniestro, con lo que se abre la hipótesis de un hecho suicida con la fábrica como objetivo.
Otros datos que abonan esa versión es que el fallecido no presentó plan de vuelo antes de despegar del aeródromo de Alvear, ni se comunicó con ninguna torre de control cercana. Tenía carnet habilitante Clase 1, por lo que se supone que acreditaba muchas horas de vuelo. Algunas fuentes especificaron que Medina volaba desde 2018 y que fueron 10 minutos lo que tardó en tomar sin permiso el Cessna del aeroclub, sobrevoló la zona de la planta para luego colisionar contra el galpón.
