El Banco Central eliminó el tope que existía para la compra o venta de moneda extranjera en efectivo, que era de 2.500 dólares mensuales para residentes y de 10.000 para extranjeros, en lo que el mercado consideraba el último resabio del cepo cambiario. A través de una circular fechada en el último día de 2016 –que trascendió ayer– la autoridad monetaria dispuso también que quien lo desee podrá ir a comprar moneda extranjera a cualquier banco, no sólo a aquel del cual sea cliente.
Allí, podrá adquirir billetes sin límite, aunque siempre quedará sujeto a demostrar la procedencia del dinero.
El banco le podrá pedir al comprador documentar el origen de los fondos, ya que sigue vigente el control por las normas de lavado de dinero.
Esas normas se basan en el conocimiento del cliente, que se da por “habitualidad, historia y carpeta”, y por los papeles que tenga para justificar los fondos.
Según trascendió, por ahora algunas entidades decidieron poner como límite la compra de 5.000 dólares por semana si el cliente sólo muestra el DNI, aunque esa norma podría ir cambiando.
De esta manera, quedó sin efecto el trámite de transferencia bancaria, por lo cual muchas entidades financieras vendían divisas sólo a sus clientes.
La medida se encuadra en la liberalización del mercado de cambios que ha impulsado el gobierno a lo largo de su poco más de un año de gestión.
Según publicó El Cronista Comercial, con esta decisión del Banco Central volvieron los “coleros”.
Se llama así a los empleados de “cuevas” del microcentro porteño que se dedican a comprar dólares en los bancos para revenderlos luego en el mercado ilegal.
También buscan cambiarle a turistas, a un precio generalmente superior, al de mercado.
Segunda caída consecutiva
El dólar cayó ayer por segunda jornada consecutiva y perdió 18 centavos, para cerrar en 16,05 pesos. Según un promedio realizado por el Banco Central, la divisa norteamericana cotizó a 15,69 pesos para la compra y a 16,05 para la venta. Así sucedió en la segunda rueda consecutiva con tendencia negativa, tras tocar un máximo histórico de 16,37 pesos el miércoles pasado. Pese a ese fuerte aumento, el billete verde cayó 11 centavos desde que comenzó la primera semana del año.