La ministra de Infraestructura, Servicios Públicos y Hábitat de Santa Fe, Silvina Frana, ocupa un área estratégica del gobierno provincial. En los primeros meses de gestión, mientras se ocupaba de coordinar con Nación la mejora de la infraestructura hospitalaria para enfrentar la pandemia, puso en marcha casi en silencio un plan registro de tierras fiscales, para tener un detalle de «aquellas tierras con las que se cuenta para poder desarrollar planes habitacionales». En ese marco, y con esa base, la provincia espera con ansiedad los anuncios del nuevo Procrear que prometió la ministra de Desarrollo Territorial y Hábitat de la Nación, María Eugenia Bielsa. Frana también habló del trabajo coordinado que llevan adelante con Nación y la implementación de los planes según las distintas necesidades y condiciones.
—¿Cómo es el vínculo con Nación, en particular con la cartera que encabeza María Eugenia Bielsa y qué expectativas hay sobre el nuevo Procrear en relación a los próximos anuncios?
—En términos generales la relación con Nación es excelente. Lo mismo con el ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat. Desde el primer día de gestión nos ha permitido trabajar desde distintos ámbitos. Por un lado, la definición de su ministerio en primera instancia fue terminar aquellas cosas que estaban empezadas: entregar viviendas que estaban pendientes de entregar y allí nos dimos un trabajo conjunto desde Santa Fe, obviamente con la anuencia del gobernador Omar Perotti. El trabajo conjunto consistió en ver qué cosas faltaban, qué faltaba pagar en algunas localidades, qué papeles estaban pendientes para regularizar situaciones y ese trabajo lo seguimos desarrollando, tenemos un vínculo permanente. A su vez, ya hace bastante tiempo y antes de hablar del plan Procrear, también sabíamos que una de las primeras políticas que había que desarrollar era una política de tierras y tener un registro, una base de datos confiable y comprobable de todas aquellas tierras con las que se cuenta para poder desarrollar planes habitacionales. El requisito para poder hacer esto era que esas tierras fueran habitables, que contaran ya con servicios como agua, cloaca, luz o que estuvieran cercanas a los servicios, que en poco tiempo se pudiera desarrollar un plan de manera tal de no encontrar obstáculos al momento de hablar de políticas de hábitat y derecho a la vivienda. Ésto es mucho más que una casa en sí misma, es el derecho a habitar un lugar digno con acceso a los servicios básicos y a lugares de recreación. En esta primera etapa con la Secretaría de Hábitat desarrollamos un sistema que se llama Registro Unificado de Tierras Fiscales donde se está convocando a todos los presidentes comunales e intendentes de la provincia para integrar con datos fieles ese registro. Cuando hablamos de tierras fiscales hablamos de tierras tanto municipales, provinciales o nacionales y esta programación tiene una coordinación permanente con el Servicio de Catastro de la provincia de Santa Fe. Así que lo primero que hablamos fue el derecho y acceso a la tierra. Después cuando a nivel nacional estén bien en claro las características del programa Procrear allí trabajaremos también con ellos. Sabemos que está el programa y algunos lineamientos pero los anuncios definitivos los va a hace Alberto Fernández.
—¿Con qué programas nacionales están trabajando?
—Está el Argentina Construye, que es un plan de contingencia, y tiene las características del Argentina Hace u otros planes nacionales, que son planes que desarrollan los municipios y comunas para convocar a cooperativas de trabajo y todos tienen un lineamiento común: obras de infraestructura de baja escala pero que generen demanda de mano de obra. y en esta demanda de mano de obra se respete la igualdad de género, es decir, convocar con la misma amplitud a hombres, mujeres y poblaciones trans. Argentina Hace y Argentina Construye tienen las mismas condiciones no solamente para dar una respuesta en obras sino también porque hoy lo que se pretende es la generación de empleo y las estadísticas del desempleo demuestran que quienes están más desempleadas son las mujeres y los mayores índices también están en jóvenes. Son políticas pensadas y diseñadas con varios objetivos. Hoy todo es muy incipiente pero Argentina Construye es un plan de contingencia que tiene varias líneas de acción que tienen que ver con una refacción de una vivienda y que tienen que ver con las conexiones de agua y gas en poblaciones vulnerables. Y Argentina Construye Solidaria, son subsidios destinados a entidades que demuestren un compromiso con poblaciones vulnerables y que a lo mejor necesitan acomodar su sede o comedor comunitario. Es muy amplio y con eso venimos trabajando muy bien. En el ministerio también funciona el Registro Nacional de Barrios Populares y allí trabajamos con algunas políticas llevadas adelante a través de la Secretaría de Hábitat. Es muy importante tener la base de datos de este Registro que se desarrolla desde hace dos años atrás con organizaciones sociales que demostraron claramente la localización, las familias en asentamientos irregulares a lo largo y ancho del país y de Santa Fe.
—¿Cuántos asentamientos irregulares hay en la provincia y Rosario?
—En Santa Fe existen 341 barrios populares, donde viven cerca de 40.600 familias, casi 131 mil personas. En Rosario hay 155 barrios populares que albergan alrededor de 80 mil personas. A nivel nacional trabajamos también con el Ministerio de Obras Públicas nacional, estamos desarrollando los planes Argentina Hace con la misma lógica: obras de infraestructura de baja envergadura y con alta demanda de mano de obra. También se está trabajando en la traza de la autopista de la ruta 34, está en proyecto la 33, está pedido para el presupuesto del desarrollo de la ruta 11 y muchísimas obras de infraestructura que tienen que ver con el ingreso a los puertos. Además la Secretaría de Asuntos Hídricos a nivel nacional está financiando muchísimas obras en Santa Fe.
—En relación a las obras vinculadas a la emergencia sanitaria, ¿cómo vienen avanzando? ¿Se están proyectando nuevas obras?
—En una primera instancia lo que nos pidió el gobernador fue terminar todas aquellas obras que tuvieran que ver con la estructura hospitalaria que había empezado el gobierno anterior y que estaban próximas a terminarse. Así finalizamos el hospital de Villa Guillermina en el norte, Coronda en el departamento San Jerónimo y el hospital de Niños Zona Norte en Rosario, esas obras de hospitales nuevos que se terminaron. Además está la puesta en valor de algunos hospitales como en la ciudad de Santa Fe el hospital Iturraspe, que había sido prácticamente destruido para inaugurar un nuevo hospital, se pusieron en valor un conjunto de salas, se reacondicionaron y se hizo con cooperativas y organizaciones sociales. También en cada departamento de la provincia en los Comité de Emergencia Covid conducidos por el senador departamental pusieron en relieve necesidades puntuales de los centros de salud y allí hubo una intervención concreta para poder terminarlos. Por otra parte, la provincia de Santa Fe fue elegida como una de los 12 lugares donde se inauguraron y desarrollaron en muy poquito tiempo los hospitales modulares, especialmente en esta semana se le dio la inauguración formal al de Granadero Baigorria que se construyó en tiempo record al igual que el resto de los hospitales. Hoy se está construyendo un hospital modular en Villa Constitución. En el hospital Provincial de Rosario están haciendo adaptaciones para poder atender pacientes covid y en el Agudo Ávila también hay un módulo. A lo largo y ancho de la provincia hubo un conjunto de intervenciones concretas que hacen que hoy la estructura pública sanitaria de Santa Fe para atender enfermedades respiratorias tiene un 100 por ciento más de capacidad instalada que hace un año. Esto obviamente se hizo en coordinación con el Ministerio de Salud que es quien indicó. La conclusión de este proceso es esta capacidad instalada que duplica a la que había en la provincia de santa fe hace un año.
