Más de 30 mil personas participaron este sábado en una gran marcha en París y en otras ciudades Francia, un día antes de la celebración del Día de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
Este movimiento, bautizado #NousToutes (Todas nosotras) e identificada con el color violeta, fue creado en septiembre, y espera “pasar del testimonio a la acción” para exigir “el fin de la impunidad de los agresores”.
Convocadas por un colectivo ciudadano, la marcha en París fue un verdadero “tsunami feminista” en las calles para decir “basta a la violencia sexista y sexual”, un año después de la ola #MeToo.
Buena parte del éxito de esta manifestación feminista, la más concurrida de los últimos años en Francia, se debe a la intensa movilización en la pasada semana.
Como no lo habían hecho en manifestaciones anteriores, distintos gremios se plegaron esta vez a la marcha. “Marchamos para exigir normas estrictas en las empresas para proteger a las mujeres de esta violencia y para la implementación de medios de prevención y de control”, anunciaron los sindicalistas.
“La idea de la marcha es unirnos. La violencia tiende a aislar y la marcha busca unir. No queremos que las mujeres sigan estando solas contra la violencia, queremos estar en un grupo grande, juntas, con ellas. La segunda idea detrás de esta marcha es crear un choque eléctrico, que haga que todos se den cuenta de lo que es la violencia sexista y sexual”, explicaba la activista Marion Schaefer.
Una encuesta presentada hace días por la fundación Jean Jaurès indica que el 86% de las francesas dicen haber sufrido algún tipo de acoso o violencia sexual en la calle –desde gestos o comentarios groseros a agresiones físicas– en algún momento de su vida.
Las mujeres de 18 a 75 años declaran haber sido víctimas de violencia física o sexual por parte de su pareja en Francia es de 225.000 al año. En 2016, 123 mujeres murieron a causa de violencia de género, una cada tres días. Más de 250 mujeres son violadas cada día en Francia, de acuerdo a cifras oficiales. En los siete primeros meses de 2018, las denuncias de violencia sexual aumentaron 23,1% respecto del mismo periodo del año anterior, según el Ministerio del Interior.
Similares marchas o manifestaciones feministas se realizaron en otros lugares de Europa, como en Ginebra, en varias ciudades alemanas como Colonia, Fráncfort, además de Atenas y Roma, entre otras.
La ola feminista coincidió ayer con la protesta, también en suelo parisino, de los conocidos “chalecos amarillos” que salieron a repudiar el aumento de los combustibles y la política económica aplicada por el presidente Emmanuel Macron.