El Abierto de Australia nunca fue un torneo donde los argentinos se destacaron con facilidad. En esta edición 2025, tras varias rápidas despedidas en la primera ronda, Francisco Cerúndolo, 31 en el ránking ATP, superó con facilidad su debut. Y en segunda ronda se enfrentó con su compatriota Facundo Díaz Acosta (73 ATP). Y fue Cerúndolo quien aprovechó el retiro de Díaz Acosta para avanzar la siguiente instancia del primer Grand Slam de la temporada.
La tensión era clara, tanto Francisco como Facundo se conocen demasiado y sabían que ambos estaban ante una gran oportunidad de avanzar a la tercera ronda del primer Grand Slam de la temporada. Los quiebres eran moneda corriente en el primer tramo del set. Poco a poco, Cerundolo conseguía despegarse en el marcador imponiendo un tenis agresivo a las líneas, Francisco encontraba tiempo y espacio en un Díaz Acosta que estaba lento de reacción, con poca movilidad.
Gestionando bien la ventaja, Cerúndolo se hacía cada vez más protagonista y encontraba en su drive un arma valiosa para desacreditar a Facundo. Francisco se hacía eco de su gran momento y cerraba por 6-2 la primera manga.
Finalizado el primer parcial, Diaz Acosta llamó al fisio para consultar sobre su tobillo izquierdo. Mientras lo atendían, el argentino parecía sufrir demasiado y con lágrimas en los ojos decidió seguir en cancha. Tras un game de prueba, la dificultad para moverse era obvia para Facundo y tras ser quebrado se acercó a la red y se retiró del partido. No era el final esperado para un partido que prometía mucho, nunca es grato para un deportista avanzar tras el retiro de su rival.