Un joven se presentó junto a otras personas en un carrito ubicado en una plaza de Villa Gobernador Gálvez y bajo amenazas entregó una nota intimidatoria donde pedía dinero. Luego le sacó fotos al lugar, pero su actitud tuvo el efecto contrario. Las personas que estaban en el lugar salieron a correrlo, lo retuvieron hasta que llegaron los empleados policiales. Ahora fue condenado a una pena condicional mediante un acuerdo abreviado.
Se trata de Raúl Alomar. Según contó el fiscal Pablo Lanza, la tarde del 21 de agosto un grupo de personas llegó hasta la plaza ubicada en Edison y Juan Domingo Perón de la vecina localidad donde se encuentra un carrito de comidas.
Uno de ellos entregó una nota intimidatoria a quién atendía en el lugar, la misiva exigía que paguen y en caso de no entregar el dinero iban a sufrir represalias. Luego sacó un celular del bolsillo y tomó algunas fotos.
Pero familiares de la víctima y algunos clientes que estaban en el lugar se dieron cuenta de la situación y salieron a correr al extorsionador. Lo retuvieron en Andreu y Dorrego y llamaron al 911 para alertar de lo sucedido. Lo mantuvieron en el lugar hasta que llegó el personal policial
El arrestado era Alomar. Los uniformados le secuestraron un celular que había arrojado durante la persecución. El joven fue imputado por el hecho. Este lunes, en una audiencia de procedimiento abreviado que estuvo presidida por la jueza María Isabel Más Varela se homologó un acuerdo presentado por las partes y consentido por el acusado. La propuesta fue una condena condicional a 3 años de cárcel más el cumplimiento de reglas de conducta por el delito de tentativa de extorsión.
Tras evaluar el caso la jueza resolvió homologar el acuerdo y condenar a Alomar a la pena acordada y fijó restricciones entre ellas prohibición de acercamiento al lugar del hecho o a las víctimas en 500 metros o a través de cualquier medio electrónico o redes sociales.
