Un hombre de 70 años fue protagonista ayer de un cuanto menos insólito hecho, en el marco de la investigación de abuso sexual en perjuicio de dos hermanitas residentes en barrio Gráfico. Mencionado en la causa por su apodo: Tucumano, fue arrestado el domingo, pero liberado después de consultar con la jueza de Instrucción Pérez Vara, quien pidió que fuese citado para el martes. El sospechoso se presentó en el Juzgado; como no estaban las actuaciones policiales, lo hicieron esperar en el pasillo. Pero cuando salieron a buscarlo ya se había ido, por lo que ahora pesa un pedido de captura en su contra.
Se lo conoce como Tucumano, apodo al cual responden muchas personas. Fuentes del caso dijeron que ese fue el razonamiento esgrimido el pasado domingo por la jueza de Instrucción María Luisa Pérez Vara para ordenar al personal de la comisaría 20ª, de Empalme Graneros, que dejara en libertad a un hombre con ese alias, quienes fue mencionado por dos hermanitas de 11 y 12 años, que fueron abusadas sexualmente luego que su padre las entregara a adultos a cambio de dinero.
La investigación judicial se inició en septiembre del año pasado con una denuncia que radicó una representante de la Organización No Gubernamental (ONG) Movimiento Evita, que daba cuenta de que dos hermanitas de 11 y 12 años, residentes en el barrio Gráfico, eran entregadas por su padre a adultos para ser sometidas sexualmente, a cambio de dinero.
Del relato de las niñas se desprendió que fueron víctimas de todo tipo de vejámenes y que además sufrían constantes maltratos físicos en su casa, donde vivían con otros tres menores y su madrastra.
Los testimonios de las nenas fueron corroborados por peritos psicológicos mientras que el informe forense determinó que ambas sufrieron “accesos carnales reiterados”.
Por el caso fueron detenidas cinco personas, de las cuales tres fueron procesadas: Víctor Walterio C., de 54 años, padre de las niñas, por abuso sexual con acceso carnal en carácter de partícipe primario y lesiones leves dolosas, ambos delitos agravados por el vínculo; su concubina Josefa A., de 42, por la misma imputación pero en carácter de guardadora; y Alfredo Juan S., alias Paraguayo, de 57 años, por abuso sexual con acceso carnal en dos hechos.
Otros dos hombres quedaron imputados de abuso sexual agravado. Se trata de Antonio C., a quien las niñas mencionaron como a Toni, el que las trasladaba en una camioneta particular desde la casa del Paraguayo hasta un departamento particular ubicado cerca de las llamadas Cuatro Plazas, donde las sometían, filmaban y fotografiaban. El segundo es Agustín V., un vecino de las niñas, a quien también acusaron por vejámenes. Ambos fueron reconocidos por las menores en rueda de personas y permanecen detenidos.
La persona apodada Tucumano también surgió de la declaración de una de las menores, que dijo que la llevaba en un auto donde abusaba de ella. El domingo por la tarde, luego de que la madre biológica de las nenas señalara en sede policial al supuesto Tucumano, el hombre fue detenido.
Fuentes judiciales indicaron que, más allá de la mención de la niña, no había elementos suficientes para dejarlo demorado ni menos aún detenido, así que el hombre recuperó la libertad, aunque fue citado a declarar el martes.
El hombre se presentó al Juzgado de Instrucción 5ª el martes pasado, pero como no estaban las actuaciones policiales del caso, se le pidió que esperara unos minutos en el pasillo. Pero durante la espera cambió de opinión y se escapó antes de ser indagado. Ahora pesa un pedido de captura sobre su persona.