Tras las filtraciones de la declaración del empresario del juego Leonardo Peiti en el marco de negociaciones para sellar su suerte procesal en un acuerdo abreviado con el MPA, donde aseguró que pagó coimas a cuatro senadores, versión que brindó bajo la figura del imputado colaborador en busca de un beneficio en la pena que deberá enfrentar, siguen los cimbronazos en la política santafesina. Quién salió al cruce fue uno de los legisladores denunciados, Lisandro Enrico, quien negó haber cobrado coimas. “Es un hecho grave y ya se lo anticipé al fiscal general (Jorge Baclini) y obviamente me presento en la Justicia para que se investigue a fondo”, aseguró. Y apuntó contra el abogado de Peiti: ”Todo capo mafia, sea del juego clandestino o del narcotráfico, tiene que tener a dos profesionales para que le ayuden a blanquear el dinero: un abogado y un contador. Terminan siendo esos profesionales tan delincuentes como el organizador. Me refiero a Luis Rossini, que es un delincuente vestido de abogado que habla y que filtra datos pero va a tener que demostrarlo”.
Peiti, que cumple prisión preventiva en una clínica psiquiátrica y enfrenta varias causas en la provincia como jefe de una asociación ilícita dedicada al juego clandestino, dijo que pagó cifras importantes en dólares a cuatro senadores, dos peronistas y dos radicales. Peiti se sentó frente a los fiscales después de haber firmado “un preacuerdo confidencial” para convertirse en arrepentido y a cambio de esos datos obtener una pena de tres años de cárcel y una multa de 536 mil dólares, entre propiedades y efectivo. Tres días más tarde hizo lo mismo, aunque ante la jueza Eleonora Verón, y repitió el discurso, agregan estas fuentes del caso: tres senadores cobraron dinero que les dio de su bolsillo, Los pagos, dice Peiti, redondearon los 315 mil dólares, aunque a esto le sumó un cuarto senador, del bloque oficialista, a quien asegura haberle abonado a través del fallecido Zar del Juego Clandestino de Rafaela David Perona un monto que no especificó.
Peiti involucró al senador Armando Traferri, a otro peronista que no mencionó y a los radicales Hugo Rasetto y Lisandro Enrico.
La respuesta a estos dichos no se hicieron esperar y Enrico dijo lo suyo en declaraciones a LT8 este lunes. Negó haber cobrado una coima de 25 mil dólares y dijo que es uno de los pocos que denunció el narcotráfico, el juego clandestino y “todas estas mafias que ahora parece que hablan como la madre Teresa”.
Respecto de los dichos de Peiti en cuanto al pago de coimas, dijo que es gravísimo que un imputado de un delito esté diciendo que le dio dinero a senadores. “Es un hecho grave y ya se lo anticipé al fiscal general (Jorge Baclini) y obviamente me presento en la Justicia para que se investigue a fondo”, aseguró.
El legislador dijo que entiende por donde viene la mano e hizo referencia tres denuncias que hizo años atrás respecto de diez garitos de juego clandestino. Aseguró que tiene una vieja disputa con el abogado de Peiti, “que es tan delincuente como él pero está disfrazado de abogado, que es Luis Rossini” afirmó. Aseguró que fue el letrado quien filtró «en el programa de Roberto Caferra» esto de que Peiti le pagaba coimas.
Dijo que a Ricardo Paulichenco lo conocía por ser el secretario legislativo.“Peiti nombra a esta persona que está muerta y no puede defenderse ni decir nada, para que se lo dé (al dinero) a los senadores Rosetto, Enrico y Alcides Calvo. Me parece que debe investigarse, que es gravísimo”.
«Ahora si Peiti dijo eso y mintió, miente en un momento que no puede mentir como imputado colaborador», explicó. «En este caso la Justicia le abre una ventanita para que diga la verdad, aporte pruebas y con eso le baja la pena pero con el compromiso de decir la verdad al Estado y probar lo que dice. Si en esa instancia miente en lo que dice pierde el beneficio y tiene un delito nuevo, y puede hacer caer toda la estrategia, así que ahora hay que preguntarle a los fiscales», sostuvo.
Enrico dijo hay una sanción penal al imputado colaborador que miente, “lo dice la ley” y agregó que no quiere interferir en la estrategia de los fiscales ni en en el accionar de la Justicia en la línea investigativa. Ahora “si dice este delincuente, que habla ahora como un testigo calificado, que le dio plata a tres senadores hay que investigarlo a fondo, por más que diga la Fiscalía que no tiene trascendencia, que lo dijo porque está enojado, que no tiene entidad. ¿Cómo que no tiene entidad? Es gravísimo y hay que investigarse”.
El senador dijo que se recupera de un post operatorio y estima que se presentará en la Justicia el próximo miércoles. Aseguró que no va a pedir ningún tipo de fuero: “Quiero que se diga la verdad, por que no puede ser que los políticos que nos jugamos, que denunciamos con nombre y apellido, que ponemos el cuero y nuestro nombre para denunciar a todas estas mafias, estas lacras de la provincia, cuando los meten presos dicen «yo les daba plata» y que quede como si nada y yo le tengo que estar explicando a ustedes a todos los periodistas de la provincia”.
Dijo que”todo capo mafia, sea del juego clandestino o del narcotráfico, tiene que tener a dos profesionales para que le ayuden a blanquear el dinero: un abogado y un contador. Terminan siendo esos profesionales tan delincuentes como el organizador. Me refiero a Luis Rossini que es un delincuente vestido de abogado que habla y que filtra datos pero va a tener que demostrarlo”
Enrico dijo que hace cinco años ya había denunciado al ex fiscal Gustavo Ponce Asahad, quien reconoció haber recibido las coimas de Peiti en connivencia con su superior Patricio Serjal, tras firmar un procedimiento abreviado. Y agregó que enfrenta estas acusaciones “con la conciencia limpia y el cuero duro, porque hay que aguantarse estas cosas y yo me las aguanto y corazón tranquilo”.