El proyecto de Ley de Góndolas para Santa Fe sumó adhesiones tras una reunión con asociaciones de consumidores, centros de estudios, pequeñas empresas y el Sindicato de Empleados de Comercio. “Con esta ley proponemos que no haya lugares de privilegio en las góndolas, y que existan condiciones que incluyan a las pequeñas y medianas empresas regionales para que también puedan ofrecer sus productos en los supermercados”, expresó el diputado Joaquín Blanco, autor de la iniciativa.
“Las grandes cadenas de supermercados tienen un amplio poder de dominio para la fijación de precios, ya que concentran gran parte del mercado, provocando que en muchos casos haya poca oferta para los consumidores. Por eso existen las exageradas remarcaciones de precios y la rentabilidad excesiva e injustificada”, dijo el legislador.
La Ley de Góndolas busca garantizar la multiplicidad de marcas de un mismo producto, impidiendo que una misma empresa o grupo económico ocupe más del 30% de las estanterías. También establece que un 20% de las góndolas se debe destinar a productos locales y regionales, como así también impide que los pagos a los pequeños productores se puedan demorar más de 60 días, o que se solicite como forma de ingreso a un establecimiento, la entrega de mercadería gratuita o a un precio por debajo de su costo.
Del encuentro hecho en la Cámara de Diputados en Rosario participaron representantes de la Asociación Empleados de Comercio, Asociación Usuarios y Consumidores Unidos, los centros de estudio Cesyac y Ceso, la cooperativa de Trabajo Districoop, y la subsecretaria de Producción, Empleo e Innovación de la Municipalidad de Rosario, María Fernanda Ghilardi.
Los presentes coincidieron en la necesidad de contar con una ley que brinde herramientas al Estado para regular la forma de exhibición de productos de la canasta básica, por estas grandes cadenas, y defender el bolsillo del usuario.
“Teniendo en cuenta que estamos atravesando una situación económica nacional de inestabilidad, pérdida del empleo y del poder adquisitivo, y que el gasto en alimentos para la clase media y media baja representa más del 50%, queremos brindar a los consumidores la posibilidad de que elijan los productos de la canasta básica por precio y calidad”, detalló el legislador socialista.
