El Concejo Municipal decidió convocar a los funcionarios municipales Luis Baita y Gregorio Ramírez para que informen sobre el accionar municipal en las múltiples inspecciones realizadas al local “La Rosa” sin que se haya advertido la conexión del local con un hotel alojamiento contiguo.
“Resulta muy raro que en La Rosa, inspeccionada más de 50 veces por alrededor de 40 inspectores, no se haya nunca constatado la existencia de esta conexión, cuando el procedimiento judicial llevado a cabo en el lugar muestra la existencia de conexiones funcionales permanentes con el hotel alojamiento a través de puertas, escaleras, sistema de videocámaras monitoreadas por una misma central en ambos locales, un único contador de la EPE, y una misma cuenta de servicio de agua”, manifestó el edil Diego Giuliano, autor de la iniciativa.
Por su parte, la concejala Daniela León sostuvo que la presencia de los funcionarios es un paso natural: “Existieron manifestaciones por parte de algunos concejales respecto al interés de que estos dos funcionarios acudan a brindar las respuestas pertinentes, por lo que, desde la comisión de Gobierno, escucharemos toda la información que puedan brindarnos al respecto”, explicó la edila radical.
Por su parte, la concejala María Eugenia Schmuck también recordó, en la misma sintonía, lo “llamativo” que resulta que el municipio no hubiera clausurado el lugar antes, en virtud de los hechos que luego constató el procedimiento de la Justicia y de la división de Delitos Complejos que depende del Minsterio de Seguridad de la provincia.
Tanto para Giuliano como para Schmuck y también para Héctos Cavallero y otros ediles de la oposición el procedimiento de la Justicia dejó atrás las sospechas “y reconoce la existencia de la conexión” entre el cabaret y el hotel lindero. Y también dio “un fuerte indicio de que existieron ciertas irregularidades en el área de Inspección municipal”.