El aviso provino de un cartonero y un vecino, y cuando en la tarde de ayer la Policía arribó al lugar, un descampado cercano a un camino rural de la localidad de Funes, la sorpresa fue mayúscula: envueltos en bolsas plásticas herméticas, y dentro de cajas cerradas, algunas con leyendas en inglés, se hallaron unos 20 fetos, huesos diversos, un cráneo, prótesis y otros restos humanos en perfecto estado de conservación.
Personal de la comisaría 23 de Funes arribó al lugar alrededor de las 15. Un amplio terreno sin viviendas al costado del camino a Ibarlucea, a la altura de la calle Tucumán. Allí estaban dispersas las cajas en un pequeño radio.
Daniel Acosta, jefe de la comisaría 23, enumeró más de 20 fetos, un cráneo, huesos (dos tibias, dos peronés, un fémur), un maxilar inferior, una mano, dedos, prótesis, dientes. También se encontraron restos de piel y otros tejidos. La hipótesis inicial, arriesgó el comisario con la salvedad de que recién hoy se realizarán los peritajes forenses, es que los restos podrían haber sido arrojados por un estudiante de medicina, y esto por el buen estado de conservación de los mismos, que se supone estaban sumergidos en alguna solución que evite la descomposición.
Mariano Minucci, médico policial, también a modo de suposición deslizó que algunos de los restos pueden ser producto de cirugías o amputaciones. “Podrían provenir de un hospital, están bien conservados, en formol, y si es así los desecharon por una vía incorrecta”, añadió. Y puntualizó: “Todo estaba embolsado y empaquetado, y hay una caja con remitente extranjero. Se envíará al Instituto Médico Legal de Rosario”.
Desde el área de Salud municipal de Rosario minimizaron la posibilidad de que los restos puedan provenir de un hospital o centro privado, por el “riguroso protocolo” que se sigue –al menos es la exigencia legal– en el desecho de residuos patológicos. También consideraron improbable que fueran “pertenencias” de un estudiante de medicina, en particular por la alta cantidad de fetos hallados. Por su parte, fuentes del Instituto Médico Legal consideraron la perspectiva de que los restos –aclarando que son los peritajes los que darán precisiones– puedan haber estado en un laboratorio o en hospital, como objetos de estudio médico. Ambas fuentes minimizaron la posibilidad de que los fetos sean producto de abortos ilegales.