En los últimos días la salud de Furia, una de las participantes más queridas de Gran Hermano, fue noticia y causo preocupación entre sus seguidores. Según se supo la participante se realizó un chequeo médico dentro de la casa y como algunos valores en el estudio de sangre no dieron como deberían la producción del reality decidió sacarla de la casa, protocolo por medio, para realizarse algunos chequeos complementarios.
Muchas hipótesis circularon en redes sociales, pero ahora fue ella quien contó lo que estaba pasando: “En este momento tengo que pensar en que pase un estudio que me pueda dar leucemia. Tengo que esperar 48 horas para que me digan qué mierda tengo”, reveló Juliana, durante una charla con Mauro y Bautista.
Furia se mostró muy tranquila y con deseos de seguir dentro del juego porque sabe que es la gran candidata a quedarse con el premio: “Yo hoy debería estar tirada ahí, pensando que me puede agarrar una poron… y que tengo 33 años y que puedo tener cáncer en la sangre. ¿Yo estoy mal? No. Cuando te pasan cosas en la vida tenés que vibrar alto porque te enojás. Creo que soy un gran ejemplo”.
“El título primero que nada es: Cuidar mi salud. No quiero asustar a mi familia, ni a mi hermana, ni a los furiosos. Algo salió mal en un estudio de sangre y como tengo un currículum familiar… por eso me preocupo”, detalló.