Hace un poco más de un mes, Newell’s iniciaba ante Colón un derrotero de muchos partidos y poco descanso. Rivales complicados como Estudiantes, San Lorenzo, Racing y River; el clásico en el Parque y el inicio en la Copa Sudamericana eran factores de alto riesgo para un equipo que transitaba una zona gris, que apenas tenía como fortaleza sus victorias en el Coloso.
Y no hay dudas que la Lepra pasó la prueba. Tuvo buenos números, algo siempre importante, pero además consiguió consolidar una idea de juego que parecía no entenderse. Y tras ganarle a Blooming con contundencia por la Copa Sudamericana, el hincha empieza a confiar en el equipo y se ilusiona, más allá de que el propio Gabriel Heinze baje a tierra y asegure que la idea no es “ser campeón”.
“Los chicos lo han hecho muy bien y tuvimos la recompensa. En otros partidos también se ha hecho todo y no se dio. Con todo lo que pasamos el domingo (frente a River), que estos chicos nos regalen una noche de estas viene muy bien”, aseguró Heinze tras el triunfo ante Blooming por 3-0.
El buen rendimiento ante los bolivianos fue una continuidad de lo que se vio ante River, a pesar de esa agónica e injusta derrota; en el triunfazo ante Racing y en algunos pasajes de los partidos anteriores. La idea empieza a verse y eso acerca al equipo a la victoria con más facilidad.
“El esfuerzo es enorme. Para mí, el gran punto que tiene este grupo es el compromiso y el esfuerzo. Después se puede jugar bien o mal, pero dan todo y se los agradezco. Vamos a seguir de esta forma, después las cosas pueden salir bien o mal. Esto es un camino”, confió el DT, ponderando como siempre a sus jugadores.
Y agregó: “No sé si el equipo viene de menor a mayor. Sí sé que tengo un grupo de jugadores que se brinda al máximo y que hace todo para que las cosas salgan bien”.
Un problema con el que tuvo que lidiar el Gringo fue con la necesaria rotación de futbolistas a partir del poco descanso entre partidos. Y no hay dudas que funcionó, incluso con jugadores ‘suplentes’ que mostraron nivel para ser titulares como Marcos Portillo, Armando Méndez, Ángelo Martino, Gustavo Velázquez, Guillermo Ortiz o Lisandro Montenegro.
“Nunca hablo de titulares y suplentes, demasiado que tengo que elegir once1 para cada partido. Nosotros tratamos de trabajar todos por igual y después el entrenador tiene que tomar decisiones. Tenemos un grupo en el que puede jugar cualquiera y lo importante es que todos se sientan con las mismas herramientas”, destacó el DT.
La idea de Heinze es proyectar jugadores, darle lugar a promesas de inferiores y proyectarlos a futuro. En medio de eso, estar en el top ten de la Liga le permite pensar en acceder a una Copa en 2024. Y tras pasar el Clásico, un partido que emocionalmente siempre es complejo, la Copa Sudamericana genera cierta expectativa, en especial tras un inicio prometedor con dos victorias.
“Esta copa la vamos a defender por el gran esfuerzo que hicieron los dos cuerpos técnicos y los jugadores anteriores, eso es lo que le pedí a mis jugadores. Llegaremos hasta donde llegaremos, pero nosotros lo que vamos a hacer es dar todo”, sostuvo Heinze, más tranquilo luego de superar un mes futbolístico que podría haber provocado una catástrofe.