Américo Gallego no se quiso sentar a negociar con el presidente de River, Daniel Passarella, para ser el sucesor de Ángel Cappa en la dirección técnica. Hay desconcierto en el Monumental por el desplante del ’Tolo’. La chance de Marcelo Bielsa también es difícil y algunos piensan en Matías Almeyda.
Cuando parecía que la vuelta de Gallego a River era cosa juzgada minutos después del despido de Ángel Cappa en el día de ayer, el ’Tolo’ le cerró la puerta hoy al diálogo con Passarella, quien se había puesto como objetivo dejar las diferencias atrás para poder negociar en persona con el técnico.
Este martes por la mañana, mientras Cappa se despedía de sus ex dirigidos y Juan José López asumía al frente del plantel en forma interina, fuentes cercanas a Gallego le confiaron a Télam que su vuelta a River no sería tan sencilla como la pintaron en Núñez.
Una fuente cercana a Gallego sostuvo a primera hora que «por la situación del club y el equipo, no cree que sea el momento para volver» y además «le gusta que no haya intermediarios en las negociaciones». Resultado: horas más tarde el DT desistió de sentarse a negociar con el Kaiser.
Lo cierto es que una vez consumada la salida de Cappa, la reunión posterior de la cúpula dirigencial para definir el nombre del sucesor fue en vano ante la negativa del principal candidato.
Es tiempo de más reuniones en las oficinas del estadio Monumental, donde se definirá un intento más por Marcelo Bielsa, quien recién tendrá vía libre de la selección chilena en enero próximo, y se agregarán más nombres a la lista.
Con este panorama, Juan José López se perfila para dirigir el superclásico del próximo martes y podría hacerlo hasta fin de año. En el medio del desconcierto, hasta se manejó la posibilidad del retiro de Matías Almeyda para que asuma el cargo. Los próximos serán días de largas negociaciones en Núñez.