El que gana conduce, el que pierde acompaña. Esa máxima política que rige la vida interna del Partido Justicialista se trasladó, al parecer, a la del Partido Socialista. Es que el presidente de esa fuerza, el senador nacional Rubén Giustiniani, aseguró ayer que está dispuesto a brindar su apoyo al ex gobernador Hermes Binner, en caso de que aspire” a la presidencia del PS, cuyas autoridades poseen mandato hasta mediados de este año.
“Nosotros hemos sostenido que debe haber una renovación. Nos parece que siempre es positiva. No estamos de acuerdo con la perpetuación en los cargos”, indicó ayer Giustiniani y destacó el “clima de unidad” que reina en el partido de la rosa, pese a la dura interna que mantuvo el año pasado con Binner, cuando el senador perdió ante el actual gobernador, Antonio Bonfatti, en mayo pasado.
De esta manera, el senador –que preside el partido desde 2003 y cuyo cuarto mandato al frente del PS vence a mediados de este año– no descartó su apoyo a Binner si el ex candidato presidencial del FAP se presenta para sucederlo en la presidencia del socialismo.
Por ahora, Binner no se ha referido al tema partidario y se dedica a asesorar a Bonfatti en el inicio de su gobierno, mientras analiza si en 2013 –es decir, de aquí a una eternidad– encabezará la lista de diputados nacionales del socialismo santafesino.
Giustiniani formuló esas declaraciones antes de participar del XXIII Campamento de la Juventud Socialista, que se desarrolla en la ciudad de Tunuyán, a 80 kilómetros de la capital mendocina. Esa actividad fue abierta el miércoles por el propio Binner, quien en la oportunidad volvió a reclamar diálogo al gobierno nacional.
Giustiniani y Binner mantuvieron el año pasado una dura puja por la decisión del primero de disputar la candidatura a la Gobernación santafesina en la interna del Frente Progresista, contra el postulante que propuso Binner, el entonces ministro de Gobierno Antonio Bonfatti.
Binner consideraba que por ser el gran elector del PS y el gobernador en ejercicio, debía ser él y su sector político quien seleccionara al candidato a sucederlo en la Casa Gris. Giustiniani, envalentonado por la buena performance electoral que había obtenido en las legislativas de 2009 –cuando perdió apenas por un punto contra el senador del PJ Carlos Reutemann– desafió el poder de Binner.
El resultado de la pelea favoreció a Binner, que impuso a su delfín Bonfatti en las primarias y logró que obtuviera el triunfo dos meses después, en los comicios generales de julio.
En la Cámara
En torno a la actividad parlamentaria en 2012, el senador socialista anticipó ayer que el interbloque del Frente Amplio Progresista (FAP) –integrado además por Norma Morandini, Luis Juez y Jaime Linares– impulsará en la Cámara alta una serie de temas pendientes de tratamiento.
Entre esa agenda, Giustiniani precisó ayer que el FAP planteará en el Senado de la Nación la “demorada” reforma tributaria, el marco regulatorio de los servicios públicos y la necesidad de fortalecer “el país federal”.
También incluyó la necesidad de avanzar en la ley de enseñanza superior “para reemplazar la del menemismo que considera como paradigma a la educación como un gasto”.
“Si tenemos la actitud de diálogo y de búsqueda de consensos con la oposición y con el oficialismo de temas que interesan al país, vamos a poder avanzar”, concluyó el senador socialista.