La intendenta Mónica Fein pidió “darle un marco de seriedad al debate” sobre la prohibición del glifosato en Rosario. A pocas horas de que al Ejecutivo se le venciese el plazo para vetar la ordenanza que restringe la aplicación de dicho agroquímico en el área periurbana de la ciudad, la mandataria envió este martes un mensaje al Palacio Vasallo para que el Concejo Municipal “pueda reunirse en los próximos días o en febrero para mejorar, perfeccionar y avanzar hacia una normativa que sea superadora”. Mientras tanto, entró en vigencia la ordenanza aprobada hace dos semanas por el cuerpo deliberante, que determina la prohibición del uso del fitosanitario.
Fein recordó que “en 2011 el Concejo sancionó la ordenanza 8.871, para que el 82 por ciento de todo el ejido municipal de Rosario esté protegido de la aplicación de fitosanitarios de todo tipo. Es decir, por ordenanza municipal y por ley provincial, hay una clara protección a la salud de los ciudadanos”.
Desde el cuerpo legislativo, distintas voces se alzaron cuando tomaron conocimiento que Fein enviaría “un proyecto superador” al Palacio Vasallo para su tratamiento y, por ende, no aplicaría la ordenanza promulgada sobre la prohibición del glifosato. El concejal Osvaldo Miatello, titular de la comisión de Ecología y Medio Ambiente, señaló: “Una vez que el Concejo sanciona, la intendenta tiene 10 días hábiles para vetar o promulgar. Si no hace ninguna de las dos cosas, queda promulgada. O sea que la ordenanza que prohíbe el glifosato, es norma legal en la ciudad de Rosario. Cuando envíe el nuevo proyecto mejorado y ampliado, le daremos el tratamiento que le damos a todas las normativas”.
Según Miatello, cuando el nuevo proyecto del Ejecutivo llegue a la comisión de Ecología y Medio Ambiente, “se planteará una discusión interesante porque la mayoría de quienes la componemos hemos manifestado nuestra voluntad de prohibir el uso del glifosato”.
Desde el Ejecutivo apuntan a la implementación de una ordenanza “más abarcativa” y que toda el área se reconvierta en un plazo máximo de 3 años, con el fortalecimiento del programa “Cinturón Verde”, que consiste en un nuevo modelo de producción agroecológico dentro de la ciudad. “Hay que implementarlo y ni siquiera fue reglamentado”, se quejó Miatello. “Al establecer límites de fumigación y la implementación de cordones verdes, le agregamos la prohibición del glifosato”, insistió el edil del bloque Compromiso con Rosario.
El concejal Pedro Salinas, autor del proyecto de normativa junto a Miatello, sostuvo: “La ordenanza no se vetó pero la intendenta Fein dijo que no la va a aplicar. Queda promulgada fictamente pero en un limbo, porque desde el Ejecutivo están diciendo que no la van a reglamentar ni aplicar. Nuestra ordenanza incorpora un nuevo elemento: la Organización Mundial de la Salud determinó que el glifosato es posiblemente carcinógeno. No lo dijo Ciudad Futura, el concejal Miatello o un grupo de delirantes. Eso permite al Estado facultar la prohibición del uso del glifosato”, concluyó el edil de Ciudad Futura.
