El secretario de Justicia de Santa Fe, Gabriel Somaglia, estimó este jueves que el juez que lleva adelante el concurso de acreedores de la cerealera Vicentin, Fabián Lorenzini, definirá el pedido de intervención de la compañía por parte de la provincia «hacia fin de este mes o principios de agosto».
Asimismo, consideró que «el mejor remedio (para la empresa) es un shock de confianza mediante una intervención de naturaleza pública».
«Los plazos procesales que hay que respetar indican que todos los plazos estarían concluidos hacia fin de mes o principios del otro. Creemos que son plazos excesivamente dilatorios, pero es lo que marca la Ley», indicó Somaglia en diálogo con Radio Con Vos.
En este sentido, el funcionario provincial remarcó que se le solicitó a Lorenzini tramitar el pedido «habilitando hora inhábiles y reducir términos, pero no nos hizo lugar», por lo que «esto se va a prolongar entre 30 y 40 días».
Según Somaglia, «existen numerosos hechos que estamos probando, en los cuales creemos que la administración de la firma puede haberse llevado de un modo negligente o poco transparente a la situación que hoy está».
«Por eso también, más allá del pedido de intervención que solicitó la provincia a los fines de instruir un salvataje que evite la expropiación, se lo solicitó la intervención para ver cuál es la mejor forma de sacar a la empresa de este momento y se le pidió al juez que no ejecutara por el momento la medida que había dispuesto de reinstalar a los directores en función de la copiosa prueba que aportamos», explicó.
Sin embargo, este hecho «no fue atendido y mereció una apelación de nuestra parte, así que la situación hoy sigue estando conducida por los directivos que llevaron a la situación de bancarrota en la que se encuentra y la provincia dando batalla para tratar de instruir un salvataje que no implique llegar al extremo de la expropiación», agregó el funcionario.
«Todas estas probanzas constituyen indicios suficientes que pueden exhibir al magistrado que la conducción empresaria no fue lo suficientemente sana y que posibilitaría el desplazamiento de los mismos», dijo Somaglia, quien recordó que Vicentin no presentó su balance anual de este año.
Por último, Somaglia consideró que «el mejor remedio (para al empresa) es un shock de confianza mediante una intervención de naturaleza pública que pueda generar en los acreedores y los bancos una alternativa de salvataje de la empresa».