El Gobierno anunció este martes que destinará unos 14.700 millones de pesos este año para subsidiar al transporte público urbano de pasajeros en el interior del país y evitar así fuerte aumentos en el costo del boleto.
«El año pasado se habían destinado 10.700 millones de pesos y este año las provincias recibirán 14.700 millones de pesos», dijo el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, en una conferencia de prensa en la Casa Rosada.
El funcionario precisó que la suba del 40 por ciento en el presupuesto destinado al transporte en el interior será para cubrir íntegramente los aumentos de salarios de todo el año y la suba de costos en combustibles.
“En los últimos 12 años hubo una creciente inequidad en la distribución de subsidios, a partir de las medidas que hemos tomado, se asignó mayor proporción en el crecimiento de los subsidios para el interior”, indicó el funcionario.
Así se resolvió hoy en una reunión encabezada por el presidente Mauricio Macri con parte de su Gabinete, unos 30 intendentes de grandes ciudades del país, representantes de empresas y gremialistas, en el Salón Norte de la Casa Rosada.
Mónica Fein, intendenta de Rosario, dijo que por la falta de mayores subsidios las tarifas eran «mucho más altas» en el interior del país que en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires.
«Venimos a reconocer esta actitud de escucha, federal, que dio pie a la toma de la decisión», dijo la jefa comunal de Rosario y agradeció también al ministro Dietrich la decisión de homologar los sistemas de tarjetas inteligentes de mejorar la infraestructura de las ciudades metrobús, calles y transporte público en nombre de las más de 30 ciudades.
Roberto Fernández, secretario general de la UTA, dijo estar «muy contento» de que el Gobierno haya sentado a los trabajadores en la mesa de negociaciones junto a los empresarios y jefe comunales de las ciudades más importantes.
Alberto Paredes, intendente de La Rioja, aseguró que con esta medida se podrá «mejorar la calidad de vida de los ciudadanos del interior y reducir la siniestralidad vial en los pueblos» y reconoció que «hay mucho que hacer en materia de infraestructura».
