Tras la publicación del cronograma de pagos a empleados públicos en la provincia y en medio de la aprobación a nivel nacional de protocolos para el regreso a clases presenciales en el sistema educativo, trabajadores del Estado, personal de la salud y docentes pusieron el grito en el cielo. En Rosario las seccionales locales de ATE, Amsafé y Siprus marcharon en reclamo del cobro de haberes y aguinaldo en tiempo y forma. También en Santa Fe trabajadores de diferentes gremios se manifestaron frente a la casa gris, en tanto que los médicos de Amra ya advirtieron que si al quinto día hábil de este mes, es decir al final del martes 7, no tienen depositados sus salarios “se procederá a la desafectación de todos los trabajadores y trabajadoras que no hayan percibido sus haberes a partir de ese momento”.
“Es una falta de respeto a los trabajadores. No se han llevado recursos a los trabajadores y trabajadoras que estamos desde el primer momento de esta pandemia poniendo el cuerpo. Nosotros hace años que venimos perdiendo, porque vamos atrás de la inflación”, se envaró la titular de ATE Rosario, Lorena Almirón. Desde la cabecera de la movilización de ayer, la dirigente apuntó directo y duro contra el gobernador Omar Perotti: “Nos congeló el salario, nos suspendió la paritaria, cerró la administración pública en enero (lo que generó que a muchos trabajadores no les renovaran sus contratos y que no haya titularizaciones). Nos perjudicó muchísimo estos meses y, sin embargo, nosotros hemos puesto lo que teníamos que poner. No así el gobierno provincial”, machacó.
Además, Almirón habló del ya no tan lejano, al parecer, reinicio de clases presenciales, para castigar nuevamente a la Casa Gris. “Están hablando del protocolo de la vuelta a las escuelas, y solamente de asistentes escolares se necesitan 200 cargos. ¿Cómo piensan que van a volver los alumnos a las escuelas si lo que hay que profundizar es la limpieza? ¿Con qué gente?”, se preguntó con enojo.
En similar tono se manifestó la dirigencia de Amra, el Sindicato de Médicos: “Ya veníamos con problemas con los 5 mil pesos, que algunos todavía no terminaron de cobrar; se promete y no se cumple; las paritarias están demoradas 7 meses”, se quejó el gremio. Y anticipó que, de cumplirse las fechas planteadas por el gobierno provincial, ingresarán en medida de fuerza a partir del miércoles de la semana que viene, ya que el cronograma “violenta clara y holgadamente los plazos máximos legales en que deben percibir sus salarios los trabajadores dependientes de la provincia”.
Y ratificó: “Los y las profesionales que no vean depositado su sueldo en sus respectivas cajas de ahorro en el transcurso del día martes 7 de julio, a partir de las 0 hora del día miércoles 8 de julio quedarán automáticamente desafectados, no debiendo a concurrir a sus lugares de trabajo. Únicamente se mantendrán las guardias mínimas”.
Prácticamente la totalidad de los gremios de la provincia, tanto públicos como privados, ya venían en guardia y con medidas –no masivas por la pandemia de coronavirus– contra la adhesión de la provincia a la nueva ley de Riesgos del Trabajo, que tiene media sanción por parte del Senado y debe tratar ahora la Cámara de Diputados. Además, a eso se sumó que en diferentes áreas aún no se hizo efectivo el pago de bonos dispuestos por el gobierno nacional para el personal que debió seguir cumpliendo tareas presenciales durante la cuarentena obligatoria por ser “esenciales”. Y como tercer punto de una lista creciente de reclamos, aparece la no renovación de contratos que fueron venciendo durante el período de aislamiento social más estricto. Ahora el eje del reclamo pasa de la reapertura de paritarias para discutir aumento de sueldos al pago mismo de los haberes, medio aguinaldo incluido, con lo que los gremios que representan a trabajadores públicos se convirtieron en ollas a presión. Y para los médicos, la tapa ya saltó: “Resaltamos, a los fines del pago de las remuneraciones, el carácter esencial que en esta pandemia está cumpliendo tanto este sector como el de seguridad, habiéndose verificado en nuestros afiliados no sólo casos de contagio de coronavirus Covid-19, sino también distintas afecciones a la salud tanto psíquica como física”.
