Nadie en Newell’s se atreve a cambiar el discurso por más que el equipo sea el único puntero e invicto del torneo tras diez jornadas. Así lo ratificó ayer Nahuel Guzmán tras la práctica matutina en Bella Vista y en la previa al choque del sábado ante Racing en Avellaneda.
“Estamos para sumar. Es algo que venimos diciendo desde el arranque y son las mismas palabras que van a escuchar del resto de mis compañeros. Uno solo se pone presiones que al principio del torneo no teníamos, así que lo mejor es continuar por este camino de tranquilidad”, dijo el arquero rojinegro.
Sobre el cruce ante la Academia, señaló: “Es un encuentro importante, como todos. Racing es un rival duro porque tiene buenos jugadores. Pudimos trabajar una semana más de lo acostumbrado y realizar una mini pretemporada para terminar de ajustar algunas cosas que siempre hacen falta”.
El Patón ponderó que hoy el plantel tiene recambio y que ha disimulado bajas durante el torneo sin problemas. “Tenemos un plantel amplio para reemplazar a los compañeros que se han lesionado. Y aquellos que están afuera tienen muchas ganas de jugar. A principios del campeonato tuvimos que cambiar la defensa en tres o cuatro oportunidades por cuestiones físicas y suspensiones. Y aquellos que ingresaron lo hicieron a la altura de las expectativas. Es una tranquilidad para el técnico que el jugador que entre vaya a rendir al máximo”, consideró.
Respecto a la propuesta del equipo, afirmó: “Venimos sosteniendo una idea desde principios de año, que es tener la pelota y presionar al rival en tres cuartos cuando no la tenemos para recuperar rápido. El desafío es mantener la presión durante la mayor parte del partido. Pero, por ejemplo, contra Vélez tuvimos que jugar un partido distinto porque el rival tuvo más tiempo la pelota que nosotros”. Por último, Guzmán evitó profundizar en un balance sobre su rendimiento pero igualmente consideró que es “positivo”. “En líneas generales, estoy tranquilo y seguramente tienen mucho que ver los buenos resultados. Cuando las cosas van bien, se trabaja más tranquilo y en un buen ambiente. Pero seguramente tendré que mejorar algunas cuestiones. Me parece que hasta ahora el balance es positivo. Vamos partido a partido y el mensaje puede cambiar de una semana a otra. En verdad, el análisis de mi rendimiento personal lo hago en casa. Y confieso que tengo autocrítica”.
