La jueza de la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe María Angélica Gastaldi quien anunció que en abril del año que viene dejará su lugar el máximo tribunal, sostuvo que había tomado la decisión no ahora sino “varios meses” atrás, ya que “había mucho ruido y agresión injustificada” sobre el Poder Judicial. Sus palabras dejaron expuesta, una vez más, la tensión entre el poder político y la Justicia en Santa Fe, aunque la ministra de la Corte, excluyó al gobernador Maximiliano Pullaro, que impulsa una renovación del máximo tribunal de responsabilidad en el clima enunciado. En la misma jornada, el jefe de la Casa Gris había tenido frases de barricada hacia la Justicia, pero a la par había exaltado la figura de la jueza Gastaldi. La magistrada rosarina, única integrante mujer en la historia de la Corte, dijo que la debería reemplazar otra mujer; pero además marcó que el máximo tribunal debería tener “paridad de género”.
Gastaldi habló con Radio 2 tras comunicar este martes a sus pares de la Corte su decisión de jubilarse a partir del 2 de abril, con lo cual se sumará a Mario Netri, que lo hará a fines de noviembre. Ellos son dos de los cinco jueces del alto tribunal que tienen más de 75 años, edad límite que fija la Constitución Nacional, aunque la cláusula, que fue declarada nula por la Corte nacional en 1999 y restablecida 18 años después, en 2017, exige a los jueces que pretendan seguir en funciones después de cumplir la edad de 75 años obtener un nuevo acuerdo del Senado de la Nación y un nuevo nombramiento del presidente de la Nación para mantenerse en el cargo. La Constitución de Santa Fe no dice nada sobre el tema.
De igual modo la gestión de Pullaro apunta a establecer el límite en la provincia, y también para sumar un nuevo sillón a la Corte, que actualmente tiene una presidencia y cinco vocalías, un número par.
En ese marco, Gastaldi dejó a salvo la figura de Pullaro, pero describiendo un clima de “belicosidad excesiva” en torno a la intención del Ejecutivo de provocar un recambio en la cabeza del Judicial. “No es mi estilo”, dijo la jueza, que negó haber recibido presión por parte del gobernador e incluso consideró que fue “constructiva” la reunión que los miembros del máximo tribunal mantuvieron con Pullaro, quien les pidió concurrir en el extraño horario de las 7.30 del pasado domingo 8 de septiembre a la Casa Gris. “Tenemos formas distintas de ver, pero las cosas se dijeron con franqueza”, dijo en referencia al cónclave.
En cambio, sobre otras líneas del gobierno provincial cuestionó: “Nos debemos un poco más de respeto”. Pero volvió a dejar a resguardo la figura de Pullaro de ese reclamo, y pareció apuntar en dirección al ministro de Gobierno, Fabián Bastía, con un sector de la prensa santafesina. “Mucha gente decía: «Se quieren quedar como ratas»”, describió.
Gastaldi defendió en líneas generales el desempeño de la Justicia, donde, dijo, repercute la crisis generalizada y “todo lo que el sistema político no puede procesar”.
De todos modos, admitió que hay jueces que actúan “con grandilocuencia, como si bajaran del mármol y tuvieran una corona de laureles encima”, y repitió: “No es mi estilo”.
En esa línea, al ser consultada sobre la reforma previsional que la semana pasada sancionó la Legislatura, dijo ser respetuosa de las decisiones de los otros poderes. Así, evitó pronunciarse sobre la constitucionalidad de la norma, un tema que deberá resolver precisamente el máximo tribunal ante las presentaciones judiciales que están formalizando gremios estatales. Sobre el punto, Gastaldi simplemente dijo que su forma de trabajar es “resolver los casos de manera concreta”.
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