El conflicto judicial que tenía el municipio desde hace más de tres años con distintas organizaciones defensoras de los derechos de los animales por la construcción de un cementerio y guardería de mascotas parece haber finalizado, luego de un acuerdo entre las partes. Una reciente modificación en la ordenanza que obligaba a su instalación permitió a la Municipalidad elegir al Bosque de los Constituyentes como nuevo lugar para el emplazamiento del cementerio, ya que el anterior predio elegido –ubicado en la zona norte de la ciudad– fue declarado como zona inundable. Así las cosas, la multa mensual que pagaba el Palacio de los Leones por incumplir con un fallo judicial queda sin efecto, siempre que no se retrase con los plazos de entrega del proyecto para posteriormente llevarlo adelante.
La subsecretaria Legal y Técnica de la Municipalidad, Carmen Donadío, explicó a El Ciudadano que “la modificación de la ordenanza, hace poco más de un mes, en la que se termina reconociendo como inundable el terreno donde se quería establecer el cementerio y la guardería de mascotas, permitió al municipio elegir un nuevo lugar y así surge la elección de un terreno en el Bosque de los Constituyentes”.
“Ya presentamos un proyecto en el cual están trabajando varias áreas, entre ellas Promoción Social y Planeamiento, más el asesoramiento de veterinarios. Esto hace que la multa que venía pagando la Municipalidad quede suspendida”, aclaró.
Por su parte, el abogado de las distintas asociaciones protectoras de animales, Jorge López Mirosevich, contó que este tema estaba vinculado “directamente a decisiones políticas del gobierno municipal que no se tomaban”. “Esto es algo que se venía discutiendo desde hacía mucho tiempo, se estaba ante una especie de encerrona porque las ordenanzas vigentes ordenaban que se cumpla y el propio municipio no acataba. Finalmente se logró encontrarle una vuelta, se modificó el artículo 1º y se cambió el lugar de instalación de la guardería y cementerio de animales”, relató.
“No tenía mucho más sentido prolongar esta disputa porque existía una ordenanza que se había modificado. Lo que se buscó fue salir de todo esto de una manera digna para todos y que no se gastara más plata pública en forma de multa, porque en definitiva es plata de todos. Por eso en un momento nosotros pedimos que se hiciera cargo de la multa la propia intendenta. Con eso no inventamos nada, son recursos que se usan a nivel judicial. Si me preguntan si se llegó a una solución digo que sí, si fue consensuada digo que sí y si me parece bien, también digo que sí”, añadió.
El profesional recordó que a partir de ahora “la Municipalidad tiene que cumplir con el convenio”. “Tienen que presentar el proyecto en la Justicia sobre el nuevo lugar respetando todas las pautas que establece la ordenanza. Lo que se pidió fue que todo se presente en un plazo medianamente corto y lo importante es que a partir de ahora deja de correr la multa. Esperemos que no exista una demora injustificada. Todavía no hay un plazo establecido para la construcción del cementerio, primero se presenta el anteproyecto y será la Justicia la que establecerá el tiempo. Estamos en un baile que ya lleva varios años y por eso confiamos en que todo se vaya solucionando paulatinamente”, subrayó.
Por último –y menos optimista que el abogado–, la integrante del Encuentro Proteccionista Diane Fossey, Rosalía Aurascoff, explicó que “simplemente es algo que tuvimos que aceptar porque por una modificación en la ordenanza que salió del Concejo Municipal se le dio autorización al Poder Ejecutivo para que decidiera el lugar donde iba a instalar la guardería y cementerio de mascotas”. “Lo que no entendemos es por qué recién en agosto de este año, cuando la ordenanza era de 1994, se estableció que la primera zona donde se iba a establecer el cementerio era inundable. Nadie había dicho nunca que esa zona no era la indicada porque había escurrimiento de agua. Eso nos llama mucho la atención”, indicó.
“Satisfechas no estamos porque nos engañaron y nos han vuelto a engañar. Estamos muy atentas y vamos a seguir muy de cerca el desarrollo de todo. Otro punto que estamos reclamando son las reuniones que no se hacen del consejo asesor del Imusa del cual nosotros formamos parte junto a otros actores. Según está establecido deben ser mensuales y en lo que va de 2014, ya estamos en octubre, no se realizó ninguna”, concluyó.
Un refugio de la naturaleza
El lugar elegido por el municipio para la instalación de la guardería y cementerio de mascotas es el Bosque de los Constituyentes, un área de conservación natural que se encuentra en el noroeste de la ciudad.
El vastísimo predio está bordeado por la avenida de Circunvalación y el arroyo Ludueña, y tiene una superficie de 260 hectáreas. Fue creado para recuperar la ecología de esta zona y es manejado por la Municipalidad de Rosario. Se puede visitar, con permiso. Incluye un pequeño lago artificial con plantas acuáticas, residuos vegetales flotantes, ranas, caracoles y tortugas.
En un principio –y para cumplir con lo que había determinado la Justicia–, la Municipalidad había elegido un predio comprendido entre Cullen y Ugarte al norte, ruta nacional Nº 34 al sur, canal Ibarlucea al este y Pasaje 1327 al oeste. Pero luego las autoridades llegaron a la conclusión de que ésa era una zona inundable, poco apropiada para la instalación de nada menos que un cementerio.
