Argentina tendrá por primera vez una “lista roja” con el registro sobre las plantas que se encuentran en peligro de extinción y así se sabrá cuales de las 10.213 especies que existen en el país podrían desaparecer, según confirmaron en la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable y el Instituto de Botánica Darwinion (Iboda).
“En la Argentina aún no tememos un inventario nacional de biodiversidad, pero estamos dando un primer paso para categorizar toda la flora vascular (es decir la mayoría, las que poseen raíz, tallo y hoja) del país con la que sabremos su localización, cantidad y si corren riesgo para generar medidas que ayuden a su conservación”, indicó a Télam Diego Moreno, secretario de Política ambiental de la Secretaría de Ambiente.
Alberto De Magistris, ingeniero agrónomo y doctor de Ciencias Biológicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA), dijo a Télam que “cerca de 500 especies vegetales, aproximadamente, se encuentran en peligro de extinción en el país y el principal factor que colabora es el avance de la frontera agropecuaria, el uso de semillas transgénicas y la contaminación de agroquímicos, porque reducen los lugares naturales en los que circulan las especies”.
El 10 de agosto del año pasado se realizó la primera reunión organizativa con especialistas botánicos y biólogos de todo el país, el Iboda y Ambiente para comenzar la categorización de las especies vasculares del país de acuerdo con su estado de conservación, cuyos resultados preliminares se darán a conocer a fin de este año, según fuentes de Ambiente.
“Hay 10.213 especies en flora nativa en el país, según los últimos datos que relevamos con la Secretaría de Ambiente, y aún estamos trabajando en el listado rojo de especies vasculares”, indicó a Télam Fernando Zuloaga, titular del Iboda.
Ese listado implica “una instancia superadora” a la ya existente de plantas endémicas (propias del lugar) de la Argentina, porque abarca toda la flora nativa.
Hasta el momento, las únicas especies que se habían logrado catalogar son las 1.744 plantas registradas en la Lista Roja Preliminar de las Plantas Endémicas de la Argentina (Planear) elaborada por la Universidad Nacional del Sur (UNS), creada por una resolución del año 2010.
Con el nuevo listado que está elaborando la secretaría de Ambiente, las categorías en las que se dividirá la flora argentina, según parámetros de la institución global Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), serán: extintas, en peligro crítico de extinción, en peligro, vulnerable, casi amenazada, preocupación menor, datos insuficientes y no evaluados.
Especialistas consideran el listado de categorización de flora “un gran paso” porque permitirá evaluar los factores que inciden en su deterioro y reveer políticas públicas en favor de su conservación.
Realizar un inventario, identificar su territorio, saber si es propiedad privada o estatal y establecer qué posibilidades hay de hacer una reserva (si se cuenta con la concesión del lugar por parte del Estado) o un refugio de vida silvestre, son algunas de las medidas, mencionadas por De Magistris, que apuntarían a la protección de las especies.
Según estudios internacionales, existen 298 mil especies de flora en el mundo y de las 28287 evaluadas, casi la mitad, 13.677, se encuentran con algún nivel de peligro.
Alerta por la peperina cordobesa, igual que por tomillo y aromito
Charly García le dedicó uno de los temas más emblemáticos del rock nacional, los reyes de España fueron agasajados con ella en su última visita, y aunque desde hace siglos se la usa para combatir alergias y dolores de panza, la peperina está en peligro y buscan salvarla de la extinción.
La legisladora cordobesa Adriana Oviedo, del oficialismo provincial Hacemos por Córdoba, presentó un proyecto para declararla como “flor provincial”, y que su estudio sea incluido en el sistema educativo local.
Para Oviedo hay una “devastación” de este semiarbusto silvestre aromático, que se ubica en las serranías cordobesas y cuyo nombre es minthostachys verticillata aunque se la conoce como peperina.
Oviedo manifestó que el proyecto tiene dos ejes principales: “Establecer a la peperina autóctona como un símbolo o un emblema más que nos represente a los cordobeses, y que a la vez se dicten normas que regulen su explotación para evitar su extinción y sin perjudicar a los que viven de esa actividad”.
La peperina, menta peperina o menta’í es un arbusto aromático silvestre de la familia de las lamiáceas, con aroma marcadamente mentolado que crece en forma de mata en las sierras del país, pero por las características particulares del clima se popularizó la que se encuentra en las zonas de los valles de Calamuchita, Punilla y el valle de Traslasierra como la principal productora de peperina del país, explicó la legisladora.
“Lamentablemente hoy la peperina está en peligro de extinción en algunas regiones de Córdoba por la gran demanda en el uso”, tanto medicinal como alimentario, afirmó la Oviedo y agregó que “para mucha gente la recolección y comercialización significa sus únicos ingresos económicos”.
Asimismo sostuvo que también hay un importante mercado de demanda de la peperina por parte de las empresas yerbateras para sus productos compuestos con yerba.
Si bien dijo que hay empresas que realizan cultivos de la peperina para la comercialización, “lo que se pretende proteger es la autóctona, la silvestre que nace en las serranías”.
El proyecto impulsa también la capacitación a los que trabajan en la recolección para que lo hagan con el tratamiento adecuado a la planta, como el sistema de corte, el tiempo y tamaño para hacerlo para de esa manera permitir su reproducción natural.
Oviedo mencionó también que hay otras zonas serranas con riesgos de extinción de especies como el aromito y el tomillo.