En un masivo plenario convocado en la sede de Smata, el gremio de los mecánicos, del que participaron unas 70 regionales de la CGT más el Frente Sindical para el Modelo Nacional que encabeza el camionero Hugo Moyano, la Corriente Federal de Trabajadores del bancario Sergio Palazzo y otros sindicatos aliados como la Federación Aceitera, el sindicalismo opositor le puso fecha a un paro nacional: será el próximo martes 30 de abril, por ahora sin movilización central pero con chances de protestas locales (ver aparte) y hasta esta noticia al margen de la cúpula de la CGT.
Al tiempo, la CTA de los Trabajadores liderada por Hugo Yasky y la fracción de la CTA Autónoma que lidera Pablo Micheli informaron su adhesión –habían resuelto la medida de fuerza en un plenario conjunto más temprano y estuvieron en Smata–, y se descuenta la participación de empresarios pyme, comerciantes y del conjunto de las organizaciones sociales que va desde el triunvirato de San Cayetano –Ctep (Confederación de Trabajadores de la Economía Popular), CCC (Corriente Clasista y Combativa) y Barrios de Pie– hasta el bloque de organizaciones piqueteras independientes o identificadas con fuerzas de izquierda.
Así, el 30 no trabajarán los bancos, no habrá clases, buena parte de los servicios públicos (como residuos en Rosario, donde el Sindicato de Recolectores adhiere) y las presiones internas se concentrarán, entonces, en el gremio que tiene la llave del paro general total: la Unión Tranviarios Automotor. En rigor saldrán a buscar la adhesión completa de la Catt, la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte –que encabeza el dragadista Juan Carlos Schmid y ya aprobó esta semana huelgas para “todos los feriados” por Ganancias y aumento de emergencia a jubilados– para que no sólo no transiten colectivos sino tampoco subtes, vuelos ni embarcaciones.
De abajo hacia arriba
El plenario en Smata al mismo tiempo de congregar a los sindicatos que integran el FSMN fue el escenario en el que se reunieron, salvo una decena, todas las regionales de la CGT del país, que vienen reclamando –en algunos casos desde hace tiempo, como las seis regionales de la provincia que conforman el Movimiento Obrero Santafesino: Esperanza, Rafaela, Reconquista, Santa Fe, San Lorenzo, Venado Tuerto– la convocatoria a una huelga general. Así, el paro se cumplirá, según de qué geografía se trate, en forma parcial o con acatamiento total, por mandato de las conducciones nacionales de gremios o por decisión de las centrales obreras a nivel local.
En Rosario, el Movimiento Sindical Rosarino, distante del moyanismo, viene pidiendo una medida de fuerza, y lo mismo por su lado hacían Camioneros, Recolectores y la Unión Obrera Metalúrgica, que ya llamó a un paro sectorial el próximo jueves 18 contra la sangría de puestos de trabajo que atraviesa el sector. Así la ciudad puede volver a convertirse en la otros tiempos proclamada “capital nacional del paro”
Fuera de Rosario y del Cordón Industrial –la CGT San Lorenzo ya avisó por boca de su titular, el municipal Jesús Monzón, que hará paro activo– el gremio ferroviario La Fraternidad ya había resuelto –en el marco de la Catt– un cese de actividades para 1° de mayo, Día de los Trabajadores. Todavía no estaba confirmado, pero todo indicaba un adelantamiento de la medida, lo que se ocurrir dejará sin trenes a Capital y Gran Buenos Aires, convirtiendo el paro del 30 de abril casi en huelga general en la zona llamada Amba.
Según publicó Tiempo Argentino, no parece probable que la UOM –que no integra el FSMN ni la Corriente Federal– permanezca al margen: su reciente congreso nacional de delegados en Mar del Plata votó el paro metalúrgico del 18 y hasta ensayó una elección presidencial cuyo escrutinio transcurrió con enormes muestras de reprobación al gobierno de Mauricio Macri.
Hoy, en tanto, la CTA Perón –fracción de la CTA Autónoma encabezada por el titular del gremio de Propaganda Médica, Ricardo Peidró, convocó a un plenario en el que se descuenta su adhesión a la medida, que sumara a una fuerte porción de los estatales nacionales de ATE. En total, el conjunto de adhesiones puede transformar en los hechos a la medida de fuerza no convocada por el secretariado nacional de la CGT en el quinto paro general contra el gobierno de Mauricio Macri. “No nos queda otro camino, el actual gobierno no escucha a los trabajadores, hace del diálogo un monólogo y avanza con esta política que ha llevado a la Argentina al borde de la quiebra”, sostuvo el documento conjunto elaborado en el barrio porteño de Monserrat.
A la calle en la región
“Seguramente acá será con movilización”, barajó la secretaria General de La Bancaria Rosario, Analía Ratner, quien así dejó picando la posibilidad de que los trabajadores de Rosario y el Cordón Industrial ocupen las calles el próximo martes 30.
Por lo pronto lo que se anticipa es que la huelga se sentirá con fuerza en la región: en el plenario porteño hubo vasta presencia de gremios locales que empujaron la medida de fuerza del 30. Entre ellos estaban los que integran la CGT San Lorenzo –Químicos, peajistas de Sutracovi, Petroquímicos de Soepu, Ceramistas de Capitán Bermúdez, Municipales de la región– que ya comunicaron su adhesión.
“No habrá actividad en autopistas, rutas nacionales y provinciales”, anticipó Leandro Bond, secretario General del Sutracovi.
“Esperemos que la CGT se despierte y se sume. El paro desde las 0 del martes 30 de abril y será durante toda la jornada. No Habrá servicio de recolección de residuos domiciliarios”, marcó por su parte Marcelo “Pipi” Andrada, de Recolectores.
«En Rosario se garantizarán guardias mínimas en hospitales y Defensa Civil como se hace siempre», adelantó por su parte Antonio Ratner, del Sindicato de Trabajadores Municipales local.
En toda la zona tampoco habrá actividad en cerealeras y puertos: “Somos parte del Frente Sindical por el Modelo Nacional y vamos a parar este 30 de abril en todo el país”, se plantó Daniel Yofra, titular de la Federación Aceitera.
Por su parte, Marcelo Barros, secretario General de Smata Rosario confirmó que el paro en todas las terminales automotrices, autopartistas, concesionarias y en General Motors de Alvear: “Somos parte del Frente a nivel nacional”, indicó
Claudia Indiviglia, secretaria General del gremio de Trabajadores Estatales (Norte) confirmó adhesión a la medida por lo que se resentirá la atención en Pami Rosario y otras delegaciones nacionales en la ciudad. “Queremos un pronunciamiento de CGT a esta medida que era ya imposible no convocar por la realidad nacional a que nos ha sumergido este modelo que lleva adelante el gobierno”, reclamó en tanto la dirigente.
En tanto, Cristian Pallé, secretario General de los peajistas de Sutpa adelantó que su sector se sumará a la medida de fuerza. No habrá actividad en peajes de rutas provinciales y nacionales.
«No es serio»
“No es serio un paro el 1° de mayo. Yo no entiendo esa forma en la que lo quieren plantear. Son días en los que trabaja sólo el 5% de la población”, ironizó el camionero Hugo Moyano, descreído de la medida de fuerza del transporte para “todos los feriados”, medida de fuerza lanzada por la Catt que estaba prevista para arrancar, justamente, en el Día del Trabajador. Pero más duro fue con la cúpula de la CGT: “Que se queden ahí. Total, en la calle está la gente comiendo y ellos van a la cena que sale miles de pesos con industriales y políticos”, despotricó. “Ellos dicen que si fuera por Moyano el país estaría parado; yo les digo que si esta CGT hubiera estado en la época de los militares, todavía estarían debatiendo con el gobierno”, concluyó.