La mesa chica de la CGT resolvió proponer al consejo directivo de la central obrera una movilización para el 17 de agosto próximo desde el Obelisco hacia la Plaza Congreso, en rechazo a la “inflación” y con el reclamo de “unidad” para resolver los problemas de la economía. “Estamos en una situación crítica en lo político, en lo económico. Me parece que eso amerita lo que desde la CGT estamos proponiendo que es hacer un llamamiento a todos los actores políticos y sociales del país”, sostuvo el dirigente Héctor Daer, uno de los tres secretarios generales de la central obrera. Aunque la marcha se planteó con la suficiente antelación para esperar decisiones y medidas oficiales, lo cierto es que avanza la convocatoria a la primera protesta sindical durante el gobierno de Alberto Fernández, que ya tuvo la inmediata adhesión de la CTA de los Trabajadores. “Hay que comenzar un proceso de movilizaciones para que los sectores populares ganen la calle, establezcan la agenda y se logre terminar con las maniobras especulativas financieras y de aumentos de precios”, planteó el titular de la CTA y diputado nacional Hugo Yasky, quien ya había planteado a dirigentes cegetistas una movilización conjunta.
“Estamos en una situación crítica en lo político, en lo económico. Me parece que eso amerita lo que desde la CGT estamos proponiendo que es hacer un llamamiento a todos los actores políticos y sociales del país, con responsabilidades en el país, para comprender la realidad juntos los empresarios, los sindicatos, los movimientos sociales”, sostuvo Daer, titular de la Federación de la Sanidad.
El sector Salud es el que más golpeó los bolsillos en el Índice de Precios al Consumidor de junio, un 7,4%, más de 2 puntos por encima del 5,3% de inflación general.
“Tenemos que encontrar una salida distinta a la que se están pensando en algunas usinas políticas, donde lo que te dicen es que la salida es un shock, y el shock es con devaluación, aumento de tarifas bruscos y más empobrecimiento de la sociedad”, advirtió Daer.
El consejo directivo de la CGT se reunirá el próximo jueves 21 para darle curso a la propuesta de la mesa chica, y definir detalles de la convocatoria.
“Solamente poniendo sobre la mesa los intereses de grandeza como nos planteamos poner primero la Patria, y empezar a recorrer todos los sectores para entender a fondo la realidad para, después, generar acuerdos y consensos en pos de una salida que pueda armonizar el momento que estamos viviendo. Si no, todo se va a poner cada vez más difícil, con especulaciones a la orden del día”, advirtió el dirigente cegetista.
“Es un escenario de una complejidad muy grande, que no tiene muchos antecedentes en los libros de economía o política, donde en un país como la Argentina se suceden endeudamiento histórico, pandemia y una guerra a nivel mundial”, advirtió.
“Yo no quiero caer sobre un sector en particular, porque estamos pidiendo a todos los sectores políticos, oficialismo y oposición, sectores económicos, empresarios, sindicales, y de los movimientos sociales, a encontrar un camino de salida común, que nos pueda devolver certidumbre. Y eso es lo que nos está faltando, certidumbres para encarar el camino de las soluciones en la Argentina”, continuó el sindicalista.
Destacó, además, que desde la CGT reclamaron cuando, en la gestión de Mauricio Macri, “se planificó y ejecutó el ajuste permanente, un ajuste al pueblo y un endeudamiento imposible para la Argentina”, y sostuvo que ahora lo hacen también con el actual gobierno, al que le reclaman “respuestas”.
Daer confirmó que un grupo de dirigentes sindicales se reunió esta semana con la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner: “Ella tiene la misma preocupación que tenemos todos de buscar y encontrar una salida a la crisis, por supuesto entre personas que les interesa la realidad del país y que no ponen por delante su jerarquía. Tienen muchísima trascendencia las reuniones que se hacen con Cristina, pero desde la CGT nos reunimos permanentemente con todo el mundo”, cerró.
Además de Daer, otro miembro de la cúpula cegestista, Pablo Moyano, de buen diálogo con Yasky, había mostrado su acuerdo con la movilización, que el titular de la CTA piena como una confluencia de manifesaciones “en todo el país” para que “se convierta en el inicio de la recuperación de la calle de los sectores populares”.
En línea con el discurso presidencial por el 9 de Julio, Yasky describió que el país está bajo “un ataque especulativo de sectores que quieren desestabilizar al gobierno” y que “golpean en la fragilidad de la situación económica”, con viento a favor “por lo que está pasando en el mundo con la guerra y el aumento de precios”.
“Hay sectores que quieren que el gobierno no termine su mandato, porque, si no, no se explica tantos aumentos de precios y la presión especulativa con el valor del dólar. Quieren profundizar la crisis y armar una hecatombe porque creen que así se les va a abrir la puerta a las políticas neoliberales que ellos proponen como un ajuste brutal”, sostuvo Yasky.
Y justificó: “Esperamos la convocatoria de la ministra de Economía, (Silvina) Batakis, pero no podemos esperar de brazos cruzados mientras que los que quieren a un gobierno de ricos para los ricos están convirtiendo en un calvario el día a día a la gente”.
«Quieren volver a tener el poder político para implementar una política de ajuste permanente para que desaparezcan los derechos de las clases populares y convertir a la Argentina en un país como otros de América latina donde la desigualdad y la pobreza se convierten en algo estructural y permanente», concluyó, deslizando además un fuerte reclamo en dirección al Palacio de Hacienda: “Hacen falta otros anuncios que le pongan límite a la especulación financiera y al aumento de precios”.