El Concejo aprobará este jueves la emergencia en el transporte urbano de pasajeros de Rosario, lo que traerá cambios en las frecuencias y recorridos. La presidenta del Palacio Vasallo, María Eugenia Schmuck, dijo que el proyecto del Ejecutivo fue acordado en comisiones y se tratará en el recinto.
El intendente Pablo Javkin había pedido tres años de excepción para negociar nuevas condiciones con las empresas de colectivos, que habían amenazado con dejar el servicio público. En ese marco, los concejales consensuaron fijar ese plazo por dos años, aunque Schmuck explicó en Radio 2 que si el sistema vuelve a los niveles previos a la pandemia -en cuanto a pasajeros y recaudación- la emergencia se cae automáticamente.
El proyecto de ordenanza
El proyecto de ordenanza dispone la emergencia por «24 meses o cuando se alcance con la recaudación el 55 por ciento del costo» o «la relación pasajero/kilómetro tenga los valores de febrero del 2020».
Además, se solicita al Ejecutivo para que «rediseñe el sistema público de transporte mediante la redefinición de líneas, frecuencias prestaciones necesarias, recorridos, ramales y paradas”, entre otras cuestiones operativas, “que adapten el sistema de transporte a las nuevas necesidades originadas por la emergencia sanitaria, los cambios de prioridades y nuevas necesidades».
En la normativa, se creará una comisión de seguimiento que estará conformada por el directorio del Ente de la Movilidad, tres concejales de la comisión de Servicios Públicos, un representante de cada una de las empresas prestatarias y uno de la Unión Tranviarios Automotor (UTA).
Las voces
Una vez conocido el acuerdo, Schmcuk, indicó que «no se puede sostener un transporte que tiene 350 millones de déficit. En la época pre – pandemia, el número de pasajeros transportados en Rosario era de 450 mil y hoy es de entre 90 y 100 mil pasajeros diarios: un 25 por ciento del número de marzo. De las 800 unidades que circulaban, en la actualidad están en el sistema 686; a partir del retiro de coches hecho por las prestatarias Rosario Bus y El Cacique».
En referencia a los costos, Schmuck detalló que antes de marzo de este año, el 55 por ciento del sistema de transporte de pasajeros se cubría con recaudación, mientras que ahora es del 22 por ciento. El resto se completa con subsidios, pero que no alcanzan a equiparar lo perdido.
«Queremos ganar en frecuencia en las avenidas y tener, quizás, menos en los barrios, pero no perder cobertura y tener mucha previsibilidad», señaló.
Y siguió: «También fue afectado por los paros y se generó un círculo vicioso que hace que el sistema sea cada vez menos sustentable en el tiempo».
Según la titular del Palacio Vasallo, la emergencia no implica recortar líneas o achicar personal sino «garantizar la cobertura y mejorar la frecuencia, es decir, rediseñar el sistema para hacerlo más eficiente».
«Por ejemplo, si hay ocho líneas que recorren los mismos trayectos por cuatro kilómetros vamos a modificarlas para que algunas de esas líneas vayan por otros lugares», sostuvo Schmuck.
Otro de los cambios serían las frecuencias. «Si un colectivo dice pasar en los barrios cada 7 minutos y no lo hace, a lo mejor ahora pasará cada 20 minutos, pero a los 20 pasa. Sí podría implicar que un viaje de más de una hora, ahora pueda hacerse en menos tiempo pero tomando dos líneas distintas», remarcó la concejala radical.
Schmuck aseguró que la pandemia hizo bajar a los rosarinos de los colectivos. «Tenemos que subir más gente al transporte público y para eso tiene que ser más eficiente y con menos dinero, que implica hacer un resideño sin sacar líneas ni achicar trabajadores», concluyó.
Por su parte, la concejala Caren Tepp de Ciudad Futura, pidió «ponerse en los zapatos de los que usan el transporte, que hoy está de paro, porque pareciera que estamos en la estratósfera». Y aseveró que «esto es un apoyo político para estar en las mejores condiciones», en el marco de la renegociación que «permita tener mayor fuerza en la mesa de negociaciones y garantizar el transporte urbano».
En tanto, el edil Eduardo Toniolli, insistió en «la necesidad que lo que se decida en el marco de la renegociación vuelva al Concejo».
«La situación es grave. Hay que garantizar el servicio y encontrar puntos de acuerdo. Esto es una oportunidad», sostuvo, por su parte, la concejala Renata Ghilotti, del bloque Propuesta Republicana.
Nación duplicó los fondos a Santa Fe
En contexto de pandemia y con el objetivo de asistir económicamente a todas las provincias del país y colaborar con los recursos esenciales para sostener los servicios del transporte público, el Ministerio de Transporte de la Nación ya transfirió más de 12 mil millones de pesos durante el 2020 destinado al transporte urbano e interurbano del interior, a través del Fondo Compensador y el Fondo Covid-19.
Para Santa Fe, el Estado Nacional destinó en lo que va del año unos 1.700 millones de pesos, cifra que significó duplicar lo que la provincia recibió en el 2019.
Además, existe una resolución vigente que otorga un remanente antes de fin de año de otros 4 mil millones de pesos para las provincias del interior, lo que alcanzaría alrededor de los 16.500 millones de pesos anuales, triplicando lo que recibieron el total de las provincias en 2019.
