“Queremos tener una ordenanza que regule a los hostels de la ciudad, que garanticen un estándar de calidad y seguridad en la atención a los turistas y a sus propietarios les va a permitir una competencia mucho más leal porque hoy están habilitados como pensiones u hospedajes”, dijo Miguel Pedrana, subsecretario de Gobierno de la Municipalidad, quien mantuvo junto a Viviana Bocca, de la Secretaría de Turismo, una reunión con más de una veintena de dueños de hostels de la ciudad para terminar de darle forma a la ordenanza que regule la actividad y finalmente sea elevada al Concejo para su aprobación.
Actualmente se encuentran registrados 38 hostels y, de acuerdo a lo señalado por Pedrana, la reunión “tuvo como objetivo consensuar la propuesta de ordenanza que regulará dicha actividad, siempre valorando la participación, favoreciendo el acercamiento del sector público al privado, y abriendo espacios de diálogo constructivos. Debido al auge de la actividad turística en la ciudad, decidimos desde el Estado local avanzar hacia una normativa específica que contemple la actividad del sector y posibilite una convivencia segura”.
En el encuentro, donde participaron un gran número de titulares de hostels, se acordó avanzar y sentar las bases para un proyecto específico para el rubro y se evaluaron los criterios comunes, entre todos. Asimismo, se decidió hacer efectiva una carta de compromiso conjunta entre los actores presentes donde se responsabilizarán de llevar adelante acciones que generen entornos “más seguros y amigables”.
Rodrigo Rincón, responsable de A&B Hostel, le dijo a El Ciudadano que “hubo una muy buena predisposición de parte de la Municipalidad; se leyó el formato de la ordenanza y se comenzó a debatir. El jueves que viene volvemos a discutir. Algunas cosas se redactaron mejor que como estaba el modelo original, en otros puntos se agregaron cosas y finalmente quedamos en repasar cada punto para la semana que viene para ir dando forma al modelo definitivo”.
Hace más de dos años, en tiempos que Pedrana era concejal y Juan Nyffenegger titular del Etur, se habían comenzado a delinear puntos en común para encuadrar el rubro. “Ahora la intendenta nos pidió que enviáramos el mensaje al Concejo. Nos falta ver la regulación para los casos de discapacitados”, agregó Pedrana, hoy subsecretario de Gobierno. Teniendo en cuenta que la mayoría de los hostels está en plantas alta de antiguas edificaciones, Viviana Bocca, coordinadora general del Etur, comentó: “Hicimos el relevamiento de los que están en planta baja y vamos a buscar créditos blandos como, por ejemplo, brinda el Banco Nación para turismo y veremos si nos acompañan para ver si las modificaciones que tengan que hacer las hacen con un crédito accesible”. De esta forma, se buscará “accesibilidad” a los locales para quienes presenten dificultades motrices.
En el encuentro lo que más se discutió “es la cantidad de baños, los metros cuadrados y la aireación que deben tener las habitaciones”, agregó Rincón, quien además admitió que, periodicamente, la mayoría de los hosteleros se reúnen para ponerse de acuerdo “con los precios mínimos y máximos por día, promociones, o algún agregado en los servicios”.
“Esta ordenanza nos va a favorecer a los que estamos y a los que vengan, por ejemplo, antes teníamos una capacidad de 13 metros cuadrados por persona, ahora, con la nueva ordenanza será de seis, es decir que podemos meter el doble de gente de la que teníamos antes. Hay quienes brindan mejor servicio, más categoría, más comodidades; están los que cuentan con aire acondicionado, o desayuno”, explicó el comerciante, quien regentea la casa de alojamiento A&B.
Un día en un hostel cuesta, como mínimo, 55 pesos; pero si el lugar cuenta con aire acondicionado se puede llegar a cobrar 65 pesos por persona. En ese sentido, Rincón añadió una particularidad según la característica del cliente: “El turista argentino no comparte habitación, incluso paga una o dos camas de más para no tener que compartir; en cambio, el extranjero comparte, no tiene problemas, pasa una noche o dos y sigue”.
Uno de los sentidos que impulsa este proyecto de ordenanza es igualar las reglas de juego para los comerciantes. Al respecto, Bocca señaló que en no pocas ocasiones “se generaban injusticias” durante las inspecciones municipales. “Porque a algún hostel no lo habilitaban por tal cosa y al de al lado sí lo habilitaban. Entonces había que terminar con esto y finalmente reglamentar para todos igual”, expresó. Y añadió: “Los dueños de los alojamientos se mostraron bien predispuestos y esperamos que pronto salga la ordenanza. Estamos trabajando de manera conjunta en la promoción de los hostels: por ejemplo, si la Municipalidad participa de la Feria Internacional de Turismo, les damos un lugar o les facilitamos folletería a los dueños de alojamientos, una manera de potenciar el trabajo mutuamente. En nuestra página web los hostels que están registrados figuran con dirección y teléfono, igual que en la guía de servicios que imprimimos”.