Search

Hay menos hambre, dicen

Argentina está entre los países en desarrollo donde más retrocedió ese flagelo. Latinoamérica también mejoró sustancialmente su situación y sólo Bolivia, en el Cono Sur, quedó relegada.

La Argentina se ubicó entre los países en desarrollo donde más se avanzó en el combate contra el hambre en los últimos veinte años y es por eso que registra uno de los índices más bajos de este flagelo, destacó el Instituto Internacional de Investigación sobre Políticas Alimentarias.

En una nueva publicación de su Índice Global del Hambre, el instituto reflejó también el importante avance no sólo de Argentina, sino también del resto de Latinoamérica, que con políticas fuertemente volcadas hacia el crecimiento y el desarrollo económico con integración e inclusión social, logró posicionarse como región en el rango más bajo del ranking, denominado “poca hambre”.

Argentina y otros nueve países figuran en el grupo de 41 naciones donde el Índice Global del Hambre es inferior a 5.

Ellos son Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Jamaica, México, Uruguay y Venezuela.

Sólo Bolivia, en el caso de Sudamérica, se encuentra en el rango de “serio problema”, en tanto Paraguay, Perú y Ecuador se ubican en el rango de “moderado”.

En todos los continentes se produjeron bajas en el indicador, aunque algunas regiones del planeta, como el sur de Asia y el África subsahariana, se mantienen por encima del promedio, con 22,5 y 20,7 respectivamente, y en condiciones denominadas “alarmantes”.

En el caso del sur asiático, se registró igualmente una baja de casi un punto, en relación con 2001; en tanto que en el sub Sahara, el recorte fue de tres puntos.

El sudeste asiático también mostró un descenso de9,6 a7,9 en diez años, y se ubica en la zona de “hambre moderado”, donde también está el norte y noreste africano, con una tasa de 5,3, menor al 6,8 de 2001.

En el caso latinoamericano, la baja fue de6,1 a4,9 lo que le permitió a la región pasar del segmento de “hambre moderado” al de “poca hambre”.

Por su parte, el sudeste europeo y la comunidad de países independientes conocida como Commonwealth, pasaron de4,4 a2,8.

Los programas Asignación Universal por Hijo en Argentina, Hambre Cero y Brasil Cariñoso en el socio principal del Mercosur, Subsidio Familiar en Chile, Asignaciones Familiares en Uruguay y similares en Ecuador y Venezuela, contribuyeron de manera importante a mejorar el nivel de acceso de las familias a una mejor alimentación.

Esto se tradujo en sustanciales mejoras en los índices de mortandad infantil y de calidad de vida de los niños, sobre todo enla Argentina, Brasil y Chile, donde como prestaciones se exige la escolaridad y el cumplimiento de un plan de salud.

Cómo se realiza el cálculo

El índice se calcula para 122 países en vías de desarrollo y economías en transición, y tiene en cuenta la proporción de la población malnutrida, la prevalencia de menores de 5 años con bajo peso y la proporción de mortandad entre estos niños.

Clasifica los países en una escala de 100 puntos, siendo 0 la mejor puntuación (no existe hambre) y 100 la peor.

Los valores por debajo de 5 reflejan poca hambre; entre 5 y 9,9 un hambre moderada, y entre 10 y 19,9 un serio problema.

Entre 20 y 29,9 son alarmantes y los de 30 o más son extremadamente alarmantes.

El índice promedio del hambre en los países en desarrollo es 14,7; menor al 16,3 de hace diez años.

10