A días del histórico triunfo de Los Pumas sobre los All Blacks, el rosarino Andrés Bordoy dialogó con Súper Rugby, en M90 Radio. El hombre formado en Duendes, que hoy integra el staff técnico del seleccionado como responsable del scrum y line, habló de todo.De cómo se fue gestando este presente del equipo, la importancia del trabajo previo, el mensaje hacía los jugadores, trabajo que ponderó por sobre lo táctico.
También se refirió a la gran decisión que tomó hace quince años, cuando dejó la tercera línea para ser pilar. Esa determinación provocó no sólo poder jugar en el rugby profesional de Franci, llegar a jugar en Los Pumas y hoy estar trabajando en el equipo más importante del rugby argentino y disfrutar de ser parte del grupo que le ganó por primera vez a Nueva Zelanda.
Al referirse al partido del sábado, Bordoy contó que nadie quería irse del estadio porque de pasar a no poder entrenarse y a los pocos meses a estar festejando un triunfo sobre los All Blacks fue muy fuerte para toda la delegación argentina.
“El sábado fue un día muy cargado de emociones, importante para todos nosotros y para el rugby argentino. El domingo fue un día de mucho análisis para nosotros en el staff técnico, mientras que los jugadores tuvieron libre para recuperar y poder despejar la cabeza. Ese día, sobre todo el staff, nos focalizamos en lo que se venía. Había que cerrar el partido con Nueva Zelanda y buscar que era lo que nos iba a servir para lo que viene este sábado. Ya estamos focalizados en Australia, sabemos que fue algo importante, fue un gran partido lo que se jugó, pero queremos estar metidos en lo que viene, nuestro objetivo es ganar el día a día”, dijo Bordoy. Y agregó: “Es importante para Rosario y para la provincia, cuando pasan este tipo de eventos te pones a pensar y toma una magnitud grande y es una alegría inmensa poder compartirla con gente del club como son Jero (De la Fuente), Emi (Boffelli), Choco (Santiago Chocobares) y Juancito (Imhoff), sobretodo. Es una alegría para todos”.
Sobre la situación de los que quedaron afuera de los 23, el entrenador rosarino expresó: “La decepción debió ser grande pero hay una energía muy buena en este grupo. La semana pasada de trabajo fue muy buena, fue una de las mejores semanas que me tocó vivir como entrenador y que se vio reflejada en el partido del sábado. Sobre todo por el trabajo que hizo este grupo de jugadores que no les tocó jugar. Eso muestra la buena energía que hay y el buen equipo de trabajo que se generó, y como entrenador es un placer poder trabajar con este tipo de grupos”.
En lo que a Bordoy le corresponde, entrenar el scrum, una formación que necesita de mucho tiempo de trabajo para lograr buenos resultados en un partido.
“Fueron menos de quince días de trabajo, porque nos juntamos un martes, el día del primer entrenamiento en conjunto con todos, y ese día de alta intensidad, hubo práctica de scrum. Teníamos algunas dudas con Mario (Ledesma) porque sabíamos que iba a haber mucha energía, muchas ganas, se iban a querer mostrar, venían los chicos de Europa, fue un buen entrenamiento, muy prolijo, se pudo hacer lo que queríamos, hubo muchos scrums de calidad. Tenemos a Guido (Petti) y Mati (Alemanno), que venían desde Europa, pero que estuvieron con nosotros toda la pretemporada, Marcos (Kremer) lo mismo, lo que es primera línea sí, porque vinieron Facu Bosch e Ignacio Callés, y Fran Gómez Kodela, que no estaban trabajando con nosotros previamente, pero vienen con una experiencia grande en Europa. Son jugadores formados y con experiencia en el alto nivel y se acoplaron rápido.”, dijo el ex Duendes.
La inclusión de Michael Cheika dentro del staff técnico argentino no pasa desapercibido, y Bordoy habló sobre ello: “Se hizo un trabajo aparte de los que es rugby, la estrategia, lo técnico y táctico, hay un trabajo de fondo muy grande, que el Tano (Loffreda) y Mario vienen haciendo desde que nos juntamos por primera vez en Casa Pumas y está dando sus frutos. Esa energía se está viendo y se vio en la cancha. La actitud, eso se ve, son cosas que pasan en la semana y se plasman en la cancha. Ver a alguien como Micheal (Cheika), que viene de afuera y que tan rápido se sienta cómodo, contento y de la manera que está involucrado, es un placer. Estamos muy contentos de trabajar con él, y como dijo en una nota Mario, Michael lo dijo muy claro en una reunión, que él tenía un propósito de ser parte del grupo y staff que le iba a ganar por primera vez a Nueva Zelanda, y cuando lo dijo nos quedamos un poco en shock, todos mirándolo, hubo una pausa, y le dio en el clavo. Contagió eso de creer, y de saber que se puede. Estamos trabajando bien, pero hay que seguir concentrados en el objetivo, en el día a día, porque a veces uno mira más lejos de lo que viene y puede perder el foco, y eso a este nivel te puede costar un partido”.
El próximo rival es Australia, y contar con Ledesma y Cheika es una ventaja, ya que el australiano fue head coach desde 2014 a 2019, y con el argentino como entrenador de forwards durante un buen tiempo.
“Claramente que ambos conocen muy bien al rugby australiano, su filosofía, cómo se toman los partidos, a los jugadores, analizar a los primeras líneas junto a Mario, que es experto, es una ventaja. Siempre uno sabe lo que el otro equipo hace, sabemos la calidad de los jugadores rivales, pero analizar mucho no ayuda, sí saber que puede llegar a pasar, pero tratamos de focalizarnos en nosotros”, dijo Bordoy.
En el inició de 2005, Bordoy pasa a jugar de primera línea, una decisión difícil y que le llevaría un tiempo poder plasmarla en resultados. Los sacrificios fueron muchos, pero pagaron dividendos. Jugó desde 2007 al 2013 en equipos del Top 14 francés (Brive, La Rochelle y Pau), y luego pudo trabajar en Pau como asistente del staff técnico y poder capacitarse como entrenador de forwards. Y la historia reciente es conocida por todos: Gonzalo Quesada lo repatrió para integrar Jaguares y ahora Ledesma, lo sumó a Pumas.
“Con el diario del lunes sería fácil decir que no me arrepiento. En ese momento fue lo que sentí, sabía que por mis características de tercera línea, no sabía si me iba a dar para irme a jugar afuera, para aspirar a un poco más, y al club le faltaban primeras líneas, se estaba por retirar Hugo (Céspedes). Ese cambió de puesto me formó como persona, ese sacrificio, lo duro que fue”, dijo el Dogo, como se lo conoce en el ambiente ovalado y además añadió: “Esa temporada debuté con Rosario M23 frente a Tucumán M23, en el Argentino. No sabía dónde poner la cabeza. Me acuerdo que después del partido me sostenía el cuello del cansancio que tenía. Fueron años duros y de sacrificios, pero que se disfrutaron también. Me fue forjando como persona y me dio herramientas en la vida. Y para hoy en día, el hecho de haber buscado mejorar y querer avanzar tan rápido, me dio metodologías de trabajo, de entrenamiento, que hoy me sirven. Con el diario del lunes sería fácil decir no y muy obvio decir si, pero estoy muy contento de la decisión que tomé en su momento, y si hoy estoy acá es gracias esa decisión”.