El diputado provincial del Frente Progresista, Jorge Henn, presentó un proyecto para solicitarles a los legisladores nacionales una solución que frene la “bola de nieve” que generaron los intereses a los deudores de tarjetas de créditos. “Hoy las familias tienen que elegir entre pagar la tarjeta o comer”, expresó.
Según estadísticas publicadas por el Banco Central, existe un alto porcentaje de familias afectadas por deudas que le significan más de 3 sueldos por mes. “De ese total, tres cuartas partes se encuentran ahogados financieramente con la tarjeta de crédito y sólo un mínimo porcentaje (0,7 %) se endeudó con la toma de préstamos hipotecarios y prendarios” resaltó Henn.
El diputado radical remarcó que “las peores consecuencias recaen sobre los sectores de menores ingresos, que no tienen acceso al crédito bancario. Según el propio BCRA la mayor parte del endeudamiento aparece en el 10% que menos gana y teniendo en cuenta que llevan tres años y medio sin poder cumplir con los pagos”.
“Las tasas son usurarias” destacó el referente radical y agregó: “Los sectores más bajos, tienen en promedio de casi un 50% de sus ingresos mensuales afectados sólo por intereses, y se los pone en la obligación de elegir entre pagar o vivir”.
En relación a la propuesta presentada en la Legislatura provincial que reclama a los legisladores nacionales acciones que den solución a esta problemática, Henn manifestó: “Está claro que no es un tema que podamos resolver desde Santa Fe, pero es nuestra obligación como representantes de los ciudadanos del pueblo de la provincia, reclamarle al Congreso, que tome cartas en el asunto y brinde alguna respuesta de alivio para aquellas personas que son arrastradas por deudas impagables, en un contexto de recesión y parálisis económica”.
“Mientras seguimos dando los debates electorales, muchas veces perdemos de vista este tipo de emergencias que son las que funcionan como espadas de Damocles, sobre los hombres y las mujeres comunes”.
“Las consecuencias de las políticas económicas del gobierno de Cambiemos son desoladoras y no sólo se llevaron puesto decenas de miles de empleos, el cierre de muchas pequeñas y medianas empresas, sino que disminuyeron casi a la mitad el poder adquisitivo de los trabajadores, que terminan siendo despojados por la trampa del financiamiento privado”.
Para finalizar, Henn sostuvo que: “Si dejamos que las soluciones vengan desde el propio sector financiero, las consecuencias serán peores. En la actualidad los bancos están ofreciendo a los morosos de tarjetas o aquellos que tienen dificultades para cancelar la deuda, un tipo de crédito personal. Pero el remedio es peor que la enfermedad. El objetivo de las entidades financieras es ganar dinero con más dinero, entonces exigen tasas para refinanciar el saldo de la tarjeta de crédito con un costo financiero total (CFT) con IVA del 100% anual. Mientras que, en préstamos personales, esos costos pueden llegar al 150%”.