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Hijos y nietos de histórico referente de Los Monos acusados por integrar empresa criminal polirrubro

Fiscalía continuó este viernes con la imputación a 28 personas por integrar una asociación ilícita dedicada a múltiples delitos que cometió tres homicidios. Para la acusación el líder es Lucho Cantero, de 18 años, quien digitaba todo desde el penal de Marcos Paz. La audiencia continuará este lunes

El más pequeño de los hijos que el Viejo Ariel Cantero tuvo con la no menos célebre Celestina Contreras y dos de sus nietos continuaron en audiencia (que seguirá el próximo lunes) este viernes: los imputan de conformar una asociación ilícita con múltiples fines delictivos que derivaron en tres homicidios luego de que esta nueva franquicia de la marca Los Monos fuera desbaratada el último lunes en 79 allanamientos que se desarrollaron en su mayoría en la zona sur de la ciudad. En rigor, no más que otro capítulo, esta vez por un recambio generacional, de la saga del clan de barrio La Granada que desde sus orígenes en el polirrubo criminal ha actuado con una estructura celular en la que cada quien toma sus propias decisiones, aunque siempre de alguna manera bajo el paraguas de la pareja originaria del grupo familiar, según los fallos que han condenado a sus integrantes en diferentes fueros y por distintos delitos.

La fiscal Marisol Fabbro continuaba en el anochecer de este viernes con la audiencia imputativa, tras el cuarto intermedio dispuesto un día antes, contra 28 personas acusadas de integrar una banda criminal liderada por la nueva generación del Cantero. De los sospechosos, 14 ya estaban detenidos en cárceles provinciales y federales.

De acuerdo con voceros judiciales, la pesquisa se inició a partir del asesinato de Ulises Gamarra, perpetrado el 24 de febrero pasado en San Francisco Solano al 2500, en zona sur. El joven fue acribillado de 14 tiros y dentro de su auto encontraron 24 mil dólares y 23 mil pesos. Según la fiscal Fabbro, escuchas telefónicas y otras medidas para esclarecer ese crimen dieron cuenta de la existencia de una asociación ilícita destinada a cometer homicidios, extorsiones, abusos y acopio de armas, amenazas y otros delitos en la zona sudoeste.

En ese sentido, para la acusación el líder es Uriel Luciano «Lucho» Cantero, de 18 años  e hijo del Pájaro, el asesinado jefe Los Monos llamado Claudio. Lucho está detenido en el penal federal de Marcos Paz y –junto con su madre Lorena Verdún y su pareja Érica Bullón, ambas detenidas en enero pasado– dirige la organización que opera desde junio de 2021 hasta la actualidad, sostiene la acusación.

Además, Fabbro sostuvo que la banda posee “mucha influencia en la zona sur de la ciudad y alrededores, operando principalmente en los barrios La Granada, Las Flores, Las Delicias y Plata”. Pesquisas del caso detallaron también que esta organización es la encargada de autorizar la venta de estupefacientes y de indicar las zonas donde pueden operar como también organizar el ejercicio de la violencia que rodea al narcomenudeo: son los dueños del territorio.

Para los investigadores, Lucho Cantero monitoreaba a su banda las 24 horas desde la cárcel de Marcos Paz a través de un joven, identificado como Dylan “Capocha” Baldón, quien fue apresado el lunes y está señalado como su mano derecha. Este muchacho era, según la acusación, el encargado de transmitir las demandas de su jefe y de dejar en claro que sin su aprobación no podía funcionar ninguna actividad delictiva en el territorio que dominaban. Dentro de los indicios recolectados, fuentes relacionadas a la causa remarcaron el gran volumen de armas de fuego que manejaba la banda.

La Granada, un pequeño barrio ubicado en el extremo sur de Rosario, detrás del casino City Center, es donde residió durante muchos años el Viejo y en el que sus hijos más grandes, el asesinado Pájaro y el varias veces condenado Ariel «Guille” Cantero, tomaron la posta en la conducción del clan criminal cuando su padre se separó de Contreras y se mudó de barrio con otros de sus hijos.

Según la investigación, la nueva generación de los Cantero se puso al frente de actividades ilícitas con base en esos barrios de la zona sur. Entre los sindicados como miembros de esta asociación ilícita están un hermano de Lucho, Gastón Ezequiel Schneider, de 22 años y quien no es hijo de Verdún; y sus tíos Macarena Cantero y Dylan Cantero, de 18, hijos del Viejo, entre otros allegados, como las parejas de estos familiares directos.

Dylan Cantero fue detenido este lunes cuando escapaba por los techos de una vivienda, en un operativo policial que contó con múltiples allanamientos, recordaron fuentes del caso para agregar que de los operativos los pesquisas secuestraron unos ocho millones de pesos, 12 vehículos, 25 motos, 90 celulares, joyas, un camión Scania, varias armas, municiones y tres máquinas de contar dinero.

Lucho Cantero había sido detenido en enero pasado con un arsenal compuesto por 25 armas secuestradas cuando intentó escapar de su domicilio en barrio 17 de Agosto, ocasión en la que también fue arrestada su madre, Lorena Verdún y su pareja Erica Bullón. En dicha oportunidad, los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra lo imputaron como instigador del homicidio de Damián Gómez, cometido en junio de 2021, por la tenencia del arsenal y también por delitos de intimidación pública, ya que con laderos en una filmación disparando armas de grueso calibre al aire la Navidad pasada desde una terraza, ubicada en las inmediaciones de la casa de su madre de calle Arrieta al 1800, en barrio 17 de Agosto.

En esa audiencia hubo un cruce entre la madre de los hijos del Pájaro y el fiscal Edery donde la mujer pidió que dejaran de “agarrársela con su familia” y sumó: “Esto no va a quedar así”, dicho que el fiscal tomó “como una amenaza”.

Los tres conforman el bloque de 28 acusados, cuya imputación continuará en el Centro de Justicia Penal el próximo lunes cuando se tratarán las medidas cautelares, describieron voceros del Ministerio Público de la Acusación (MPA), quienes dejaron trascender que entre los delitos puntuales que se le achacan a la banda hay al menos tres homicidios cometidos entre el año pasado y la actualidad. A los homicidios de Damián Gómez y Ulises Gamarra, se le suma el de Luciano Muscio, asesinado a tiros el domingo 3 de julio pasado para robarle la moto en la autopista Rosario- Buenos Aires. El caso también tiene una decena de prófugos, además de un menor.

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