Decenas de hinchas argentinos durmieron en las playas de Río de Janeiro, luego de festejar hasta la madrugada de hoy en bares y avenidas la victoria del seleccionado de Lionel Messi 2-1 sobre Bosnia, en juego por el Grupo F de la Copa del Mundo, disputado en el estadio Maracaná.
Los argentinos amanecieron este lunes bajo palmeras, algunos cubiertos con banderas y otros vistiendo camisas celestes y blancas, muchas con el 10 de Messi, en las arenas de la playa de Copacabana, la más conocida de la Ciudad Maravillosa.
Argentina, con un golazo de Messi en el segundo tiempo y otro en contra de Bosnia al inicio de la primera etapa, ganó ayer 2-1 al combinado europeo en su debut en la Copa del Mundo.
Decenas de miles de simpatizantes argentinos festejaron el triunfo en los típicos bares del barrio Lapa, zona centro de la ciudad y la Avenida Atlántica, junto a Copacabana, en la zona sur.
No se registraron mayores incidentes dentro del estadio, salvo algunos insultos y provocaciones a hinchas brasileños que respaldaron a Bosnia.
«El Maracaná se convirtió en la Bombonera (estadio de Boca Juniors) y la Avenida Atlántica parecía la Avenida 9 de Julio (de Buenos Aires)» comparó el noticiero de la TV Bandeirantes.
«Los argentinos vistieron de celeste y blanco el Maracaná, ellos cantan todo el partido, son una hinchada distinta a la nuestra, que sólo aparece cuando la selección juega bien», señaló Mauro César Pereira, comentarista de la TV ESPN.
