Holanda y Dinamarca protagonizaron un choque muy reñido en el que la suerte inclinó la balanza a favor de la Oranje 2 a 0 en el Soccer City de Johannesburgo en el primer encuentro del Grupo E.
El partido comenzó muy fuerte, con más ocasiones para la teóricamente inferior Dinamarca. Los artificieros de la Dinamita Roja (en esta ocasión de blanco) se mostraron con más ganas de guerra que la artillería de la Naranja Mecánica. Los daneses no se dejaron amedrentar por uno de los firmes candidatos a alzarse con la Copa Mundial y dificultaron el juego veloz al contraataque al que están acostumbrados los neerlandeses.
En un panorama casi de guerra, los holandeses optaron por mandar balones largos a sus delanteros, quienes tampoco dieron el resultado deseado. Los daneses, lejos de achicarse, contraatacaron con un buen remate de Nicklas Bendtner tras el centro de Dennis Rommedhal, la ocasión más clara. Hasta ese momento, mediado el primer tiempo, los arqueros no habían tenido demasiada actividad.
La banda derecha de los daneses llevó la mayor parte del peligro antes del descanso, con un Rommedhal inspirado que creo varias ocasiones más y protagonizó otras tantas. Su asociación con Bendter fue clave en el ataque danés durante la primera parte. Fue un primer tiempo entretenido al que, si hubiera que sacarle un pero, sería la ausencia de un gol.
Holanda, a pesar de contar con el 61 por ciento de la posesión del balón, no acertó al arco. Dinamarca, por su parte, se frotaba las manos de camino al vestuario: los dos anteriores partidos de Copa Mundial que había llevado ese resultado al descanso, los había terminado venciendo. Pero la estadística estaba a punto de quebrar.
Los neerlandeses volvieron incisivos del descanso. Un centro desde la banda de Van Persie provocó una carambola entre el Simon Poulsen y Daniel Agger, que alojaron la pelota en su propia meta, en lo que sería el primer autogol del campeonato.
El tanto era el septuagésimo de Holanda en un Mundial y ponía fin a una sequía anotadora de la Oranje de 289 minutos en el torneo.
Las arremetidas neerlandesas, desde entonces, comenzaron a ser más frecuentes. Rafael Van der Vaart, en el difícil papel de sustituto del lesionado Arjen Robben, tuvo algunas acciones dignas de mención, como un remate al primer palo en el 59. Otros veinte minutos de asedio tendrían su recompensa, con un gol de Dirk Kyut tras adelantarse a su marcador para empujar un balón de Eljero Elia que había golpeado en el palo. Ibrahim Afellay tendría otra oportunidad de ampliar la cuenta al final del partido, pero Poulsen se desquitó de su error anterior sacando la bola casi sobre la línea de meta.
Los pupilos de Morten Olsen tendrán opción de enderezar su rumbo frente a Camerún el 19 de junio en Pretoria. Por su parte, la Naranja Mecánica podría sellar su pase a octavos frente a Japón ese mismo día en Durban.
Formaciones
Holanda: Stekelenburg; Van der Wiel, Heitinga, Mathijsen, Van Bronckhorst; Van Bommel, De Jong, Van der Vaart, Sneijder; Kuyt, Van Persie. DT: Bert Van Marwijk.
Dinamarca: Soerensen; Jacobsen, Agger, Kjaer, Mtiliga; J.Poulsen, Jorgensen, Eriksen, Rommedahl; Grönkjaer, Bendiner. DT: Martin Olsen.