Una historia de honestidad y solidaridad en tiempos de crisis económica generalizada. María, una mujer que vive en Roldán, encontró un maletín que, una vez abierto, descubrió que tenía mucho dinero y decidió devolverlo y donar la recompensa a un merendero. La mujer, madre de tres hijos, halló la valija a unos metros de una garita de colectivos sobre la ruta 9 donde esperaba el colectivo para ir a pedirle a alguno de sus empleadores comida para su familia, ya que es empleada doméstica, y el aislamiento social obligatorio agravó su situación económica.
Cómo se extravió ese maletín con dinero en efectivo es un misterio. Lo cierto es que el dinero pertenecía a una empresa de la localidad de Monje. María y su familia lograron contactarse y decidieron devolver la suma. A cambio, recibieron una gran cantidad de mercadería para paliar el duro momento económico, y 5 mil pesos que fueron donados a un merendero comunitario de la localidad de Roldán.
“Me tocó salir a trabajar porque no tenía para comprar ni un pedacito de pan para mi hija. En la garita encontré un maletín pero no lo pude abrir. Mi marido lo abrió con la amoladora y había muchos sobres con un membrete de una empresa de Monje. En todos los sobres que abrimos había plata”, contó María a Fm Roldán 92. Según su relato, llegaron a contar unos 50 mil pesos, y se estima –a partir de los sobres que no decidieron abrir– que la suma rondaría el millón de pesos.
Abajo de los sobres blancos había un sobre marrón con una partida de nacimiento y se comunicaron con esa persona. “Mi hijo lo buscó por internet y hacía casi un día que el maletín estaba perdido. Cerca de las 15 llegó un matrimonio que nos dio señales de cómo era el maletín y nos dimos cuenta que eran los dueños”.
“Le avisé a la mujer que había sacado 500 pesos para comprar comida y me dijo que no había problemas y me preguntó qué necesitaba. Le dije que mercadería para mis hijos. Después se fueron y cerca de las 19 llegó un utilitario con mercadería como para dos meses”, expresó sorprendida.
«Recibimos de un súper de Funes mercadería habida y por haber. Carne, pollo, milanesas, albóndigas, bifes, fideos, lentejas. Calculo que los 50 mil pesos que abrimos estaban en esa mercadería. La señora me mandó un mensajito preguntando si había llegado el supermercado», contó a Radio2.
Antes de retirarse, el dueño del maletín le preguntó qué más necesitaba y María pidió ayuda para un merendero de Roldán al que asisten chicos. Ante el pedido, al otro llegó un taxi a su casa con una donación de 5 mil pesos que fueron destinados al merendero Corazón Solidario, a cargo de Joni Mansilla.
María contó que su familia trabajó durante 17 años como caseros en un campo, pero fueron despedidos. De ahí en más, tanto ella como su esposo se la rebuscan en diferentes rubros para ganarse la diaria y cuentan con el apoyo de personas de Roldán.
