La historia del rugby argentino posee grandes momentos, protagonizados por eximios jugadores, pero son muy pocos los que traspasan la barrera y se convierten en referentes, en ídolos, en modelos a seguir. Hugo Porta está en esa elite, ha sido un jugador que marcó a varias generaciones, un símbolo de Los Pumas y del rugby mundial.
En una reciente encuesta de El Hincha, el ex apertura de Los Pumas fue elegido como el jugador por el cual referentes rosarinos pagarían una entrada. Surgido en el humilde Banco Nación de Buenos Aires, Porta es sinónimo de rugby. Desde hace un tiempo, una de sus mayores responsabilidades es como dirigente, como presidente de Banco Nación, su club de toda la vida.
El pasado miércoles, Porta fue entrevistado en el programa “Súper Rugby” en Radio M90. El ex apertura del seleccionado argentino repasó sus inicios, no sólo en Los Pumas, sino en el rugby en general. Además contó lo cerca que estuvo de dejar la ovalada por la redonda, lo que muestra su talento con el pie.
Un Porta muy joven, sin haber debutado en primera división, jugaba los sábados al rugby y los domingos un torneo de fútbol en el equipo de las Tres Tiras (Adidas) junto a ex glorias del fútbol argentino, ya que su papá había jugado al básquet en River y tenía muchos amigos en el club de Núñez. “Amadeo (Carrizo) me dijo ‘usted tiene que jugar al fútbol’, pensé que era un chiste, le respondí que en el único club que jugaría es en Boca y al martes siguiente me llamó Carmelo Faraone, que era el entrenador de Boca. La verdad, me asusté (risas), le dije que estaba jugando al rugby. Me hubiera gustado jugar el fútbol”, contó Porta, y luego continuó la entrevista relatando la fortuna que tuvo para poder jugar en Los Pumas, allá por 1971, ya que llegó al seleccionado como medio scrum, pero la mítica dupla de entrenadores compuesta por Ángel Papuchi Guastella y Eduardo Poggi, ante la necesidad de un apertura, lo cambiaron de puesto. “Llegué como el cuarto medio scrum, porque jugaba de nueve, y se dio la casualidad que Los Pumas volvieron de Sudáfrica, y varios estaban lesionados, y Hermida, que era el que tenía que jugar de apertura estaba lejos de Guastella, y Papuchi lo llamaba y no lo escuchaba. Pasé justo por al lado, me agarró del brazo y me preguntó si me animaba a jugar de 10. Sólo respondí preguntando qué había que hacer, y ahí empecé a jugar de diez. Y en el club, cuando vieron el cambio de posición en el seleccionado, también me cambiaron de puesto”, confió el diez.
En sus años como jugador, además de haber sido considerado como el mejor apertura del mundo. Porta siempre recibió invitaciones desde el extranjero para ir a jugar y uno se destacó por su exquisita pegada. En referencia a los métodos para patear: el pocito, la arena y el tee (NdR: es un pequeño soporte que se apoya en el suelo y sobre el cual se pone la pelota de rugby), uno de los goleadores históricos de Los Pumas expresó: “Pocito (risas), porque en mi época no existía el ‘tee’ todavía. Una vez me invitaron a jugar un Barbarians a Nueva Zelanda, estaba desayunando, vino un pibe rubio, flaquito, muy joven, con un tee, a decirme que iba a imponer eso y que se iba a empezar a patear con el tee. Le respondí que nunca lo había utilizado. Me preguntó si me podía tomar un momento para ir a patear con él, y fui. Pateamos un rato, el pibe me iba preguntando algunas cosas, y mientras tanto las metía todas. Ese pibe era Grant Fox, que después fue uno de los mejores aperturas que tuvo All Blacks”.
Sobre un momento difícil de su paso por Los Pumas, Porta remarcó que uno de ellos fue el fracaso en la primera Copa del Mundo que se disputó en Nueva Zelanda. “El Mundial de 1987 fue el primero de la historia del rugby, fue un Mundial que todos quisimos ir a jugar. Ese plantel que fue, jugó el Mundial antes de empezar el primer partido, porque todos queríamos estar adentro del plantel. Y una vez que dijeron ‘estos son los que van a ir’, el equipo en vez de subir sus expectativas, se aflojó. Jugamos un muy mal Mundial. Jugamos mal con Fiji y perdimos, no creo que hayamos subestimamos a nadie y mucho menos si tenés puesta la camiseta Argentina. Después le ganamos penosamente a Italia, y eso fue un poco estar casi afuera del Mundial, porque teníamos que hacer tres tries ante Nueva Zelanda, y solo hicimos uno, y ese equipo no demostró lo que tenía que haber jugado”, comentó Porta, y luego agregó: “Creo haber asumido esa responsabilidad como capitán, porque la pasé muy mal después del Mundial, estuve mucho tiempo metido en mi casa, y me acuerdo que el primer partido después del Mundial fui a jugar a Rosario, me pararon en la ruta y el policía que me detuvo me dice ‘usted es Hugo Porta, es el que patea’ y me pide permiso para hacerme una pregunta. ‘¿Por qué pateó con arena?’, me dijo (risas). Con el tema de la moda de ponerle arena, el primer penal con Fiji usé arena y no la levanté ni cincuenta centímetros del piso, es una historia de esos tiempos”.
Las comparaciones son odiosas, a los aperturas de Los Pumas siempre se les exige un poco más, y que jueguen en el mismo nivel que lo hizo Porta. “Siempre hay un nuevo jugador. El diez que se pone la camiseta de Los Pumas es mejor que Hugo Porta seguro. El último que se puso la camiseta número diez de Los Pumas es mejor que al anterior. Los que juegan hoy son muy buenos, y hay algunos que tienen un porcentaje de acierto a los palos superior al que yo tenía. Conmigo pasa lo mismo que con Gardel, que cada vez canta mejor. Pasa eso, la gente se acuerda de todo lo dulce, un poco diferente debo haber sido”, analizó entre risas el ex capitán de Los Pumas.
Luego de la salida de Agustín Pichot como representante de Argentina en World Rugby, el nombre de Hugo Porta sonó muy fuerte como posible reemplazo. Hugo es muy reconocido a nivel mundial y podría ser un buen candidato. “Tengo conocimiento que Argentina no tiene un representante. Mi acercamiento al rugby hoy está en mi club. Tengo que tratar que mi club esté bien, que los chicos que no pueden pagar la cuota, sigan viniendo a jugar, no estoy con la mente metida en el rugby internacional. Mi interés pasa por otro lado en este momento. De todas maneras, hay algo que uno siempre tiene asumido, que aunque no ocupe una posición en la dirigencia represento al rugby argentino, soy reconocido como argentino y eso me llena de satisfacción, pero no sé lo de la World Rugby, no lo he pensado y mi mente está en otra cosa”, confesó el ex diez de Los Pumas.