Desde 2014 la obra social de los empleados públicos provinciales Iapos otorgó 1.610 tratamientos de fertilización asistida, como define la ley Nacional 26.842. Del total, 1.359 fueron de alta complejidad y el restante de baja, que cuestan un 60 por ciento menos.
Del total, 291 fueron en 2014 (247 fertilización in vitro o FIV más inyección intraplasmática de espermatozoides o CSI y 44 Inseminaciones artificiales intrauuterinas o Iaiu). En 2015 se hicieron 503 (417 FIV-CSI y 86 Iaiu). En 2016 fueron 550 (469 FIV/ CSI y 81 Iaiu). En lo que va del 2017 son 266 (226 FIV/CSI y 40 Iaiu). La tasa es del 18 al 25 por ciento de éxito según el método y el prestador elegido.
La cobertura incluye procedimientos de criopreservación de gametas y embriones, la utilización de gametos heterólogos y el 100 por ciento de los medicamentos.
“La baja es aplicada como primer intento por mujeres con óvulos y ciclos normales. Son grupos reducidos de mujeres y el costo es bajo porque sólo es monitoreo y la inseminación mientras que la alta incluye fertilización in vitro, por ejemplo”, explicó a El Ciudadano la directora de Iapos, Soledad Rodríguez.
Después de la aprobación del decreto en 2014 pasaron unos meses e incorporaron la prestación para mujeres que no están en pareja (concubinato o matrimonio) con un hombre. “Es una porción menor de los casos. Es muy esporádico. Los más son parejas del sexo opuesto con problemas para concebir. No hemos tenido caso de mujeres u hombres que obtuvieron la autorización de la Justicia para la subrogancia”, concluyó la ex directora del Hospital Provincial.