La Justicia santafesina ordenó a la obra social Iapos a garantizar la asistencia diaria a una mujer de 32 años que tiene problemas motrices por un tumor en la columna. A mediados de 2017 le reconocieron 7.500 pesos por mes para que un asistente la cuidara, pero en marzo pasado dejaron de hacerlo. Cuando el caso llegó a los tribunales, la obra social respondió que su madre podía pagar ese servicio. No tuvo alternativa y lo hizo, pero después pidió el reintegro. Luciano Juarez, a cargo del juzgado Civil y Comercial N°8, resolvió que la obra social de los empleados de la provincia le tiene que devolver la plata. “Vivimos épocas donde la Justicia está debilitada y en crisis, pero aún hay jueces que actúan con equidad, y buscan proteger al más débil”, dijo Carlos Pieretti, abogado de la mujer, quien aclaró que aún la sentencia no está firme.
Delicada
La mujer tiene un tumor benigno en la columna desde 2000. la enfermedad le complicó de modo progresivo el oído, el habla y la movilidad. Hoy usa una silla de ruedas y necesita que un especialista la atienda en su casa todos los días. Desde junio de 2017 y hasta febrero del año siguiente, Iapos le reconocía 7.500 pesos mensuales. Cuando renovó el pedido de esa cobertura, la obra social le pidió nueva documentación y en marzo dejó de pagar sin previo aviso. Iapos informó que no reconocían más ese servicio y que, en cambio, lo que necesitaba la paciente era un gabinete interdisciplinario que la cuide. Justificaron el recorte, a la vez, con el argumento de que la madre de la beneficiaria podía costear el servicio. Ella siguió pagando de su bolsillo y a la par recurrió a la Justicia. “Cuando las prestadoras de salud niegan servicios sugiero que hablen con un abogado y reclamen sus derechos, porque hay jueces que los van a escuchar”, contó a El Ciudadano el abogado de la mujer con el fallo a favor como antecedente.
La Justicia definió este año que la obra social deberá devolverle la plata que no le reconoció y garantizarle los servicios de la asistente para que la especialista trabaje con la paciente de lunes a viernes, de 10 a 20, en su casa. También deberá reintegrarle la deuda del subsidio que percibía y le cancelaron en febrero del año pasado.