Dos empleados judiciales llegaron a una vivienda ubicada en Pellegrini al 1700 para hacer cumplir una orden de desalojo contra los moradores del lugar. Cuando entraron a la casa se llevaron una desagradable sorpresa: encontraron a una mujer sin vida en el suelo de unas de las habitaciones.
Guillermo B. y Luis T. trabajan como oficiales de Justicia y como parte de su rutina de trabajo fueron hasta el inmueble para notificar el oficio de desalojo. Lo primero que percibieron apenas traspasaron la puerta fue un fuerte olor de putrefacción. Y al llegar a una de las piezas, la explicación: una mujer fallecida, tendida en el suelo.
Un móvil del Sies, la Agrupación de Bomberos Zapadores (ABZ) y la fiscal de Homicidios Culposos Mariana Prunotto arribaron al lugar tras el aviso de los empleados judiciales.
La mujer fue identificada como Graciela Beatriz L.. La fiscal ordenó el traslado de su cuerpo al Instituto Médico Legal para la correspondiente autopsia. En principio, por los indicios analizados en la misma vivienda, no hay sospecha de muerte violenta.