El directorio del FMI mantiene la moción de censura y señala que “la Argentina no ha adoptado las medidas exigidas por el Fondo para hacer frente a los datos inadecuados del IPC-GBA y el PIB”. A pesar de mantener la moción de censura, en el gobierno se valoró que el directorio no avanzará en aplicar sanciones. Es que de acuerdo con el reglamento del FMI en su artículo 13, hubiera correspondido que la Argentina recibiera una sanción. Sin embargo, el Board decidió otorgar un nuevo plazo.
Seguramente debe haber influido en la decisión del Directorio el cambio de autoridades en el Ministerio de Economía y, según pudo saber este diario, el ministro de Economía, Axel Kicillof, tomó contacto con el organismo.
A través de un comunicado, el Directorio rescató “el trabajo y la intención de introducir un nuevo IPC nacional a principios de 2014 en curso de Argentina” como asimismo los esfuerzos para “subsanar las deficiencias en sus datos del PIB”.
En este sentido, el organismo le solicitará al país “implementar acciones específicas para mejorar la calidad de sus datos oficiales del IPC y el PIB de acuerdo a un calendario establecido”.
El FMI le solicita a las autoridades que a partir de marzo del 2014 Argentina deberá implementar “un conjunto inicial de medidas especificadas, incluyendo la publicación de un nuevo IPC nacional y las estimaciones revisadas del PIB”. Asimismo, otras medidas que no son detalladas en el comunicado “deben ser implementadas a finales de septiembre de 2014 y finales de febrero de 2015”.
También el comunicado señala que “el director general, Christine Lagarde, debe informar a la Junta Ejecutiva a los 45 días de cada uno de los plazos mencionados en el estado de ejecución de las acciones indicadas”; en síntesis, el Board se involucra en el seguimiento de los avances de las autoridades argentinas en ejecutar las medidas previamente establecidas por el Fondo.
Luego de cada informe presentado por Lagarde, el Board examinará los resultados en función de los procedimientos establecidos por el organismo multilateral. Finalmente, el FMI valora “la importancia de las conversaciones en curso con las autoridades argentinas a mejorar la calidad de los datos del IPC y el PIB oficial de la Argentina y está dispuesto a continuar este diálogo, y, más en general, de continuar fortaleciendo la relación entre Argentina y el Fondo”.
El directorio analizó el problema de las estadísticas argentinas durante una hora y media; la propuesta elevada por Argentina pretende adecuar las estadísticas de inflación y del PBI de acuerdo con “las pautas estadísticas internacionales y los requisitos exigidos por el Fondo a sus Estados miembros”.
Nuevo IPC Nacional
Hace casi un mes el Board recibió por parte de la gerencia del organismo el informe sobre los avances de las estadísticas argentinas como informara el vocero del organismo, Gerry Rice: “La gerencia del FMI presentó un informe a la Junta Ejecutiva con respecto a la respuesta de la Argentina a las preocupaciones planteadas por el FMI en la calidad de los datos oficiales reportados al FMI para el Índice de Precios al Consumidor para el Gran Buenos Aires (IPC-GBA) y Producto Interno Bruto (PIB)”, señaló Rice.
Lo remitido y firmado por la directora gerente, Lagarde, a cada miembro del Board son las conclusiones a la que arribó el equipo técnico junto con las del staff respecto de si Argentina logrará a partir de estas nuevas estadísticas adecuarse “a los requisitos de estándares de calidad y confiabilidad” que exige el Fondo a todos sus países miembro.
Antes del cambio de autoridades en el Palacio de Hacienda, la intención del entonces ministro de Economía, Hernán Lorenzino, era que el nuevo indicador comenzara a mostrar los primeros resultados de mediciones en enero para darlos a conocer en febrero de 2014. Durante casi dos años Lorenzino trabajó junto con el Indec en el diseño del Nuevo Índice de Precios Nacional, definiendo la metodología, los tipos de encuesta, la canasta de precios, entre otros. Para su diseño contaron con la colaboración y auditoría de técnicos del FMI.
Respecto de las modificaciones efectuadas para el cálculo del Producto Bruto Interno, las autoridades argentinas casi no informaron.
Cabe consignar que el organismo que dirige Lagarde ha sido bastante “tolerante” con la Argentina ya que desde 2007 había serios cuestionamientos respecto de las estadísticas. Recién en febrero de este año aplicó una moción de censura.
De acuerdo con fuentes internacionales, el FMI no podía continuar tolerando estas enormes discrepancias con las estadísticas públicas toda vez que Argentina ocupa un lugar en el codiciado Grupo de los 20. Justamente el organismo multilateral tiene como función, entre otras cuestiones, velar por la transparencia y confiabilidad que brinden los países.
El tema es que la elaboración del nuevo IPC también fue llegado a cabo por Ana María Edwin y Norberto Itzcovich, brazos ejecutores de la intervención que llevó a cabo en el Indec el entonces secretario de Comercio, Guillermo Moreno. A punto tal que el actual ministro de Economía hizo conocer apenas designado que el Indec estaría bajo su órbita.