Casi un millón de pesos por mes no llega a las arcas municipales como parte de la Tasa General de Inmuebles (TGI) porque son cuentas exentas a nombre de entidades religiosas. Según contaron desde la Municipalidad de Rosario, hay 394 cuentas de este tipo en la ciudad y la mayoría (145) son del Arzobispado. Muy atrás están las 27 de la Iglesia Evangélica Misionera Argentina. En cuanto al inmobiliario provincial que recauda la API, en Rosario sólo 2 de los 512 edificios atados a los cultos lo pagan, tal como publicó este lunes El Ciudadano. El artículo reflejó parte de la Campaña Federal por la Separación de la Iglesia del Estado desde donde intentan informar sobre cuánto dinero reciben las instituciones de culto del Estado para eliminar el beneficio. La campaña tomó fuerza después del rechazo a la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) y puso el foco en el vínculo entre el Estado y la Iglesia católica, principal protagonista de la cruzada en contra del aborto legal.
Impacto
Según explicó a El Ciudadano la subsecretaria de Economía municipal, Margarita Zabalza, el sistema de tributo rosarino (tasa municipal) es diferente al santafesino (impuesto), pero no planteó muchas diferencias con el gravamen del gobierno de Santa Fe sobre cuántas propiedades están exentas en la ciudad. El beneficio lo piden las entidades religiosas y lo pueden renovar cada 10 años. Figuran dentro de lo previsto en el artículo 76 del Código Tributario de Rosario. También alcanza a otros inmuebles: edificios estatales, vecinales, clubes amateurs, organizaciones sindicales, partidos políticos, mutuales, casas de jubilados con vivienda única y cuanto inmueble sea declarado por el Concejo Municipal como de «bien público».
Consultada sobre cuánto significan en la recaudación global de la TGI proyectada para este año, Zabalza dijo: “Serán unos 11 millones de pesos que no recibe la Municipalidad. Es menos del uno por ciento de lo presupuestado para 2018 ($1.600 millones)”. Si se comparan los 11 millones proyectados este año por el municipio con el informe del ex concejal y actual diputado Héctor Cavallero sobre lo tributado en 2011, llegó 10 veces menos dinero a las arcas municipales. Hace siete años fueron 1.006.320 de pesos con los que se beneficiaron a las entidades religiosas en Rosario. El entonces concejal proponía sacar el beneficio a las instituciones de culto, los consulados, las asociaciones empresarias, los colegiados y los clubes que tenían recaudaciones altas, como el Club Rosarino de Pelota o el Rosario Plaza Jewell. En total, Cavallero dijo que la Municipalidad de Rosario dejaba de cobrar 25 millones de pesos, un 10 por ciento de la recaudación anual.