La agrupación Camioneros Unidos por Santa Fe pidió ante el Ministerio de Trabajo de la Nación la impugnación de la asamblea convocada para esta tarde por la actual conducción del Sindicato de Camionero de la provincia. El actual líder del gremio, Sergio Aladio, quiere desafiliarse de la Federación Nacional de Trabajadores Camioneros conducida por Hugo Moyano, para evitar de ese modo la intervención nacional y el llamado a elecciones.
Juan Chulich, líder de la agrupación Camioneros Unidos por Santa Fe –encolumnado con Moyano–, rechaza lo que definió como “una maniobra” de Aladio para continuar al frente del gremio. “Ellos no están autorizados para realizar la asamblea”, indicó el dirigente en diálogo con El Ciudadano.
Aladio tiene mandato hasta el 28 de junio, fecha en que culmina el plazo de cuatro años de la comisión electa en 2012 con Marcelo Dainotto a la cabeza. La delegación santafesina fue intervenida por la Federación Nacional el 24 de abril de 2014, dos semanas después del crimen del camionero Nicolás Savani. En mayo renunció Dainotto y en septiembre de ese año fue condenado a dos años de prisión condicional en un juicio abreviado por retención indebida de fondos.
Rubén López tomó el timón del gremio hasta que, en marzo de este año, Aladio –al frente de la lista Azul y Blanca– se quedó con la conducción. Según Chulich, esa elección –a la que se presentó una sola lista– fue irregular. El referente de Camioneros Unidos por Santa Fe, que impugnó las elecciones de marzo, espera ahora que la Federación liderada por Moyano vuelva a intervenir el sindicato y llame a elecciones dentro de los 90 días para legitimar la nueva conducción.
La asamblea de esta tarde, que tiene por objeto votar la desafiliación del sindicato provincial de la Federación Nacional, fue convocada por Aladio y se realizará a partir de las 15 en calle Pasco entre Sarmiento y San Martín, en la sede local del gremio. Antes, a las 14, Aladio presentará la memoria y el balance de su gestión.
Según Chulich, se trata de “una maniobra irregular”, ya que la actual conducción debería lograr las tres cuartas partes de los votos de los 22 mil afiliados que hay en la provincia para que la asamblea tenga validez y la filial local pueda desafiliarse de la Federación. De hecho, la agrupación Camioneros Unidos espera que entre el lunes y el martes el Ministerio de Trabajo de la Nación declare nula la asamblea.
“La asamblea está impugnada desde el lunes por cómo se convocó y por cuestiones de seguridad”, señaló Chulich en referencia a la imposibilidad de juntar a 22 mil afiliados en las puertas del gremio. “La asamblea no va a tener validez”, vaticinó el dirigente.
Pero, además, Chulich cuestionó a Aladio y sus seguidores con el argumento de que “ir a la asamblea es traicionar a Hugo Moyano” y agregó: “Si hoy un camionero gana lo que gana es por Moyano, nuestro líder máximo”. El dirigente advirtió que, en caso de que haya desafiliación, los camioneros santafesinos “no podrán participar de las paritarias ni tener el convenio colectivo que conseguimos con Moyano, lo cual es un golpe bajo para los afiliados”.
Aunque confía en que la Nación hará lugar a la impugnación pedida por su sector, Chulich dijo: “Existe la posibilidad de hacer un gremio paralelo; nosotros no queremos convivir con esta gente que lo que menos le interesa son los trabajadores. Son paracaidistas que cayeron hace dos o tres años”, concluyó el líder de la agrupación Camioneros Unidos por Santa Fe.