El colaborador informático del fiscal de la causa AMIA fue imputado a raíz de haber violado el artículo 189 Bis, apartado 4 del Código Penal.
«Será reprimido con prisión de un año a seis años el que entregare un arma de fuego por cualquier título a quien no acreditare su condición de legítimo usuario», establece la norma. Lagomarsino le entregó la pistola calibre 22 que se halló juntó al cuerpo y que según las pericias fue de la que salió el disparo que mató a Nisman.
Además, la fiscal Viviana Fein informó que continúa evaluando pruebas y que comenzó a analizar las cámaras de seguridad del edificio debido a que los registros de ingreso y egreso presentan «falencias».