Lucía Estefanía U. tiene 24 años, es madre y dijo que hace poco se enteró que está embarazada. La detuvieron el martes últimos en unas viviendas sociales de Winter al 3800, en el sudoeste, donde la PDI secuestró una pistola calibre .365 y municiones. Fue la cuarta persona imputada por el ataque a la sede de Fiscalía en Montevideo al 1900: están formalmente acusados tres varones, uno de ellos menor. Si bien no le achacaron haber perpetrado el ataque, le endilgaron encubrirlo. La sospechosa se desvinculó. También fue imputado un joven de 22 años detenido en el mismo operativo, aunque a este último le atribuyeron un robo calificado. Le encontraron un auto robado y un arma. El juez interviniente les dictó la prisión preventiva hasta el 14 de noviembre.
En la audiencia este viernes se conoció que Lucía es hija de un policía. Se la relacionó sentimentalmente con Damián «Colombiano» Chávez, uno de los tres imputados en el crimen de Jonatan «Bam Bam» Funes, ocurrido en febrero de este año. Ella dijo que son amigos, también de los hermanos F., uno de ellos menor, involucrados en la causa de la balacera a Fiscalía. En una audiencia por el homicidio de Bam Bam, la única testigo había mencionado a Lucía: afirmó que en su Facebook ubicó una foto del Colombiano, quien luego sería detenido e imputado. Este crimen es parte de una seguidilla de muertes vinculadas con disputas territoriales entre los clanes Ungaro-Funes con los Caminos-Segovia, estos últimos bajo la órbita de la banda de Los Monos.
Detenidos
El primer detenido por el ataque a la Fiscalía Regional Rosario, ocurrido el pasado 14 de agosto, es José Luis C., Lo imputaron de manejar el Renault 9 gris del que partieron los disparos cerca de las 2.45 en la fachada del edificio, en Montevideo 1968. Esta balacera –parte de una saga de dieciséis intimidaciones contra funcionarios policiales y judiciales que intervinieron en la llamada megacausa Monos– inició una persecución. El auto tomó calle España al sur y a gran velocidad una patrulla lo persiguió por varias cuadras. En un trayecto tomó Francia, Saavedra, Crespo y paró en la cortada Chancay. Desde su interior dispararon contra la Policía. En 24 de Septiembre volvió a detenerse y de nuevo hubo disparos, explicó el fiscal en esa oportunidad. Hizo un trayecto más hasta que llegó a Seguí y cuando logró adelantarse se bajaron al menos dos personas. Finalmente lo detuvieron en Seguí al 3600.
A fines de agosto cayó Leonel Alejandro F. Lo imputaron por la balacera y otros dos hechos con armas en un contexto de violencia de género. El juez Luis María Caterina dictó la prisión preventiva en su contra hasta el 12 de octubre.
Los últimos en caer fueron Lucía Estefanía U. y Matías F., hermano de Leonel. Este último era menor al momento del ataque. Quedó bajo la órbita del juzgado de menores. Lo indagaron este jueves por amenazas coactivas y por su decisión –ya cumplió la mayoría de edad– pidió ir a la cárcel de Piñero, explicó una fuente del caso.
En cuanto a la muchacha, el fiscal Matías Edery realizó este viernes una imputación genérica. Dijo que está vinculada con las personas que estaban en el interior del auto y si bien no iba en el habitáculo la madrugada del ataque, estaría relacionada con situaciones previas a la balacera.
El fiscal le achacó a Lucía U. los delitos de encubrimiento de delito precedente especialmente grave, por tratarse de intimidación mediante amenazas calificadas dirigidas a la Fiscalía para que deje de investigar hechos de amenazas a magistrados, agravadas por el uso de arma de fuego; también daño calificado porque lo realizaron con el fin de impedir el libre ejercicio de las funciones de los funcionarios del Ministerio Público de la Acusación y atentado a la autoridad calificada por el uso de arma.
El fiscal aclaró que la muchacha tiene una relación muy estrecha con los detenidos. «Ese vínculo nos permite suponer por informes de inteligencia que también participa. En principio no participa de esa célula que se encargó de cometer este atentado y algún otro», aseguró.
Edery explicó que hay material balístico que salió de una misma arma, la filmación de la cámara de seguridad de Tribunales que toma el paso del vehículo utilizado para el hecho y testimonios que direccionan la investigación hacia los sospechosos.
Lucía eligió hablar. Dijo: «No tengo nada que ver con nada». Aseguró que es empleada de comercio y que el arma que se secuestró en su local no tiene que ver con ella. Agregó que cursa un reciente embarazo y es madre de un niño que no alcanza los dos años. El juez Gonzalo López Quintana dicto la prisión en su contra hasta el 14 de noviembre, aunque es probable que una vez que se constate su estado de gravidez su defensa solicite una morigeración de la medida cautelar.
El tercer detenido
También fue imputado este viernes Matías Nicolás C., aunque por el delito de robo calificado. Este joven de 22 años fue detenido en el local comercial de Lucía U. Para el fiscal, el sospechoso junto con un cómplice se llevó un Volkswagen Suran de calle España al 5800. La sustracción se produjo cerca de las 4 de la madrugada del 31 de agosto pasado.
Si bien este sospechoso no está vinculado con el ataque a Fiscalía, marchó preso porque se lo encontró con el auto robado y un arma de fuego. Para este joven, el juez también dictó la prisión preventiva hasta el 14 de noviembre.