Un hombre de 49 años que estaba haciendo repartos en su moto este jueves por la noche fue embestido de frente por un auto 4×4 con cuatro personas a bordo en el túnel Celedonio Escalada, colisión que lo dejó internado en gravísimo estado y con respiración asistida en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez. En una publicación en la red social Instagram, el hijo de la víctima relató que el conductor del vehículo de mayor porte, una SUV Kia Sorento, intentó darse a la fuga, pero fue alcanzado y obligado a detenerse por un testigo del siniestro, otro motociclista que venía detrás. También denunció un intento de la familia del conductor para “limpiar todo este caso con dinero” y advirtió: “Va a pagar por lo que le hizo a mi viejo, no se lo va a llevar de arriba por más plata que quiera poner para ocultar todo”. Este viernes compañeros de trabajo de la víctima cortaron la calle Balcarce a la altura de Mendoza en reclamo de justicia, en un escrache frente a la rotisería de propiedad de quien lo chocó.
Según testimonios, Hernando Fredes iba en su moto hacia la zona norte por avenida del Valle cerca de las 22.30 del jueves tras terminar su jornada de trabajo: su hermano refirió que dejaba de hacer repartos generalmente antes de la medianoche por precaución. Pero cuando tomó por el túnel Celedonio Escalada fue violentamente embestido de frente por un automóvil con cuatro personas que iba hacia el centro por el carril contrario. En esas circunstancias el conductor aparentemente disminuyó la velocidad pero continuó su marcha, pero terminó siendo seguido e interceptado por otro motociclista de reparto que lo obligó a frenar y filmó un presunto intento de intercambiar lugares entre el conductor y el acompañante.
La situación se viralizó rápidamente y otras filmaciones abonaron la denuncia de que Gustavo A.,de 53 años y dueño de una conocida rotisería céntrica conducía en estado de ebriedad el Kia Sorento y no auxilió a la víctima ni detuvo la marcha hasta que que lo obligaron a hacerlo en Pichincha y Güemes, donde se hizo presente un móvil policial.
En la tarde de este viernes Gustavo A. estaba demorado en la comisaría 7a. y el fiscal de Homicidios Culposos Walter Jurado, no había resuelto si salía en libertad. En esa circunstancia, la familia de la víctima ponía en du da si se habían realizado los controles de alcoholemia y narcolemia de rigor, ante versiones de supuestas interferencias que después abonó el hijo de la víctima en su perfil de Instagram.
Un hermano de Fredes resumió la gravedad del cuadro de Hernando: hundimiento de tórax, fracturas múltiples con astillamiento, pulmones comprometidos y lesiones en el cráneo. No estaba claron a qué velocidad se desplazaba la SUV, pero las heridas daban cuenta de que no era a poca, en un tramo considerado de riesgo y en el que se indica precaución.
Relatos familiares dan cuenta de que Hernando tenía un carrito de comidas frente al club Gimnasia y Esgrima, pero durante la emergencia sanitaria por la pandemia de coronavirus comenzó a trabajar en reparto, actividad que mantiene hace unos tres años en Pedidos Ya. Decenas de sus compañeros de trabajo replicaron la situación en redes sociales y montaron un escrache en Balcarce al 1200, frente a la rotisería Sagitario, cuyo propietario sería Gustavo A. Alli expresaron su indignación y su reclamo de justicia con pintadas en el frente del local, que estaba cerrado. En tanto, colegas de la víctima buscaron también el registro de infracciones, comprobando que el Kia Sorento acumula actas en proceso por exceso de velocidad y al menos una por atravesar un semáforo en rojo.