El titular de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de Río Grande, Oscar Martínez, confirmó que la firma KMG Fueguina cerró las puertas de su fábrica para «redireccionar» sus negocios en el país. La empresa se encargaba de producir artículos para Kodak. Pero según publican portales locales, dejó de producir y pasaría a ser sólo un importador de cámaras digitales.
Este miércoles se supo que, luego de un conflicto y la toma de la empresa por parte de sus operarios, finalmente la empresa KMG aceptó pagar el ciento por ciento de las indemnizaciones a sus, ahora, ex medio centenar de trabajadores.
KMG había ofertado a los operarios y empleados una liquidación en cuotas y pagada en cheques, lo que motivó la toma de la planta, que por ahora se mantiene, publica radiofueguina.
Desde la UOM, que nuclea al grueso de los trabajadores, admitieron que la ocupación no se levantará hasta que el dinero no esté acreditado ya que “no hay garantías” de que la empresa pague el dinero correspondiente a las indemnizaciones
KMG, que fabricaba productos Kodak, se convirtió así en la décima fábrica en territorio fueguino que baja sus persianas desde el comienzo de la gestión de Mauricio Macri. En poco más de tres años, vieron cesar sus actividades IFSA que fabricaba computadoras; la autopartista Visteon; Leanval que producía celulares; la fábrica de lavarropas Athuel; Telecomunicaciones Fueguinas, también fabricante de celulares; JO&ED, fábrica de televisores y microondas; Interclima, de aire acondicionado y las fábricas de televisores y aire acondicionados, Foxman y Audivic.
El gremialista Martínez repudió el accionar del Estado provincial: “Reclamamos al Ministerio de Trabajo provincial que supuestamente debe defender a los trabajadores y han decidido jugar para la empresa, aconsejándoles no transitar la conciliación obligatoria porque tendrían un perjuicio económico, nos hemos enterado ahora en horas de la tarde”.
Según datos suministrado por la UOM, el empleo en las empresas electrónicas y autopartistas a febrero de este año era de 4275, es decir 6167 trabajadores menos que en noviembre de 2015, cuando alcanzó los 10442 operarios en las fábricas de Río Grande.